La Casa Blanca ha emitido una contundente declaración sobre el reconocimiento del Estado de Palestina por parte de aliados clave. Donald Trump considera estas acciones una «recompensa para Hamas», un grupo islamista, marcando una clara divergencia en la postura internacional.
La postura de Trump: «recompensa para Hamas»
El presidente Donald Trump, a través de su secretaria de prensa Karoline Leavitt, ha expresado su firme convicción de que el reconocimiento del Estado de Palestina por importantes aliados es una concesión al grupo islamista Hamas. Leavitt declaró a periodistas en el recinto que «francamente, él cree que es una recompensa para Hamas. Cree que estas decisiones son sólo palabras». Esta declaración se produjo el 22 de septiembre de 2025 en Washington, en un contexto de creciente presión internacional.
Escalada de reconocimientos y el conflicto en Gaza
El pasado domingo, el reconocimiento formal del Estado de Palestina por parte de Reino Unido, Canadá, Australia y Portugal intensificó la presión sobre Israel. Estas acciones ocurren mientras Israel incrementa su guerra en la franja de Gaza, un territorio devastado donde han muerto decenas de miles de personas. La agencia de la ONU para los refugiados palestinos, UNRWA, ya mostraba su sede cerrada en la ciudad de Gaza el 20 de mayo de 2025, reflejando la grave crisis humanitaria. Francia también ha reconocido oficialmente el Estado de Palestina. Ante este panorama, Trump se reunirá con líderes de los principales países musulmanes durante la Asamblea General de la ONU en Nueva York, con la guerra en Gaza como eje central de las conversaciones.
Otras agendas internacionales: Venezuela y el control nuclear
Más allá del conflicto en Gaza, la administración Trump ha mantenido una postura intransigente en otros frentes. El presidente rechazó una carta de Nicolás Maduro con invitación al diálogo, y Karoline Leavitt enfatizó que «maduro repitió muchas mentiras en esa carta, y la postura de la administración sobre Venezuela no ha cambiado». En el ámbito del control armamentístico, Rusia ha propuesto prorrogar un año el último tratado nuclear con Estados Unidos, un acuerdo que limita el número de cabezas nucleares desplegadas a 1.550 por cada parte. Sin esta prórroga o sustitución, ambas partes podrían incumplirlo.
La postura de Donald Trump ante el reconocimiento de Palestina, sumada a otras declaraciones sobre conflictos internacionales, subraya una política exterior que privilegia la firmeza y la descalificación de gestos diplomáticos que no se alinean con su visión. ¿Cómo impactará esta retórica en la ya polarizada geopolítica del Medio Oriente y en la mesa de negociaciones de la ONU?