Con todo y que se trata de un asunto de tremendas implicaciones económicas, la realización o no del proyecto del Cuarto Muelle podría resolverse en el propio ayuntamiento de Cozumel.
Luego de que el caso volvió a salir a flote, la Semarnat ha anunciado que revisará los permisos. De hecho, el Colectivo Ciudadano Isla Cozumel ya precisó qué permisos federales tienen los promoventes del muelle y cuáles les siguen faltando.
Pero en medio de tanto papeleo, el ayuntamiento de Cozumel tendría la última palabra.
Y hay antecedentes rotundos: proyectos importantes que no se llevaron a cabo porque los ayuntamientos restrictivos optaron por no dar licencias de construcción.
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El entonces presidente municipal de Solidaridad, Gabriel Mendicuti (del PRI), le negó el permiso al poderosísimo Grupo Xcaret para un home port en Playa del Carmen.
También el entonces alcalde de Benito Juárez, Julián Ricalde (del PRD), negó la licencia al polémico proyecto Dragon Mart, que además contaba con el respaldo del gobernador priista Roberto Borge. La presión política fue enorme.
En el caso del Cuarto Muelle, el PVEM, que forma parte de la coalición gobernante en QR, ya expresó su absoluto rechazo.
Así que el ayuntamiento de Cozumel la tendría menos complicada.
