La tensa relación comercial entre Estados Unidos y la Unión Europea alcanza un nuevo hito. Washington ha formalizado los aranceles del 15% a automóviles de la UE y sus autopartes, medida que entra en vigor retroactivamente desde el 1 de agosto, generando incertidumbre entre los fabricantes europeos.
La oficialización de los aranceles a la industria automotriz
El gobierno de Donald Trump emitió este miércoles un aviso formal para implementar el acuerdo comercial con la Unión Europea. La confirmación establece que los automóviles y las autopartes importados desde la UE están sujetos a un arancel del 15% a partir del 1 de agosto.
Un acuerdo marco con impacto retroactivo
El Departamento de Comercio y la oficina del Representante de Comercio de Estados Unidos, a través de un aviso en el Registro Federal, han modificado el calendario arancelario estadunidense. Esto permite aplicar el Acuerdo Marco alcanzado con la UE a finales de julio, el cual rebaja los aranceles del presidente Donald Trump a 15% sobre la gran mayoría de las importaciones europeas, incluyendo los vehículos.
Aunque el acuerdo se modificó para ser retroactivo al 1 de agosto, los fabricantes de automóviles europeos han permanecido a la espera de esta notificación formal para clarificar el panorama.
Exenciones clave y sectores beneficiados
La notificación estadunidense también detalla cientos de productos de la Unión Europea que quedan exentos de aranceles. Entre ellos se incluyen recursos naturales no disponibles en Estados Unidos, como el corcho. Asimismo, todas las aeronaves y sus piezas, además de productos farmacéuticos genéricos, sus ingredientes y precursores químicos, quedan libres de gravámenes.
Esta decisión de Washington, aunque esperada, subraya la complejidad de las relaciones comerciales y el constante pulso por la hegemonía económica global. ¿Cómo impactará esta formalización retroactiva la estrategia a largo plazo de los fabricantes automotrices europeos y los flujos de inversión en sectores clave?