Los controvertidos vuelos de deportación desde el centro conocido como el “Alcatraz de los caimanes” han comenzado, marcando un nuevo hito en la agresiva política migratoria de Florida. Este desarrollo, revelado por el gobernador Ron DeSantis, intensifica el debate sobre los derechos humanos y la gestión fronteriza en el sur de Estados Unidos.
La operación de deportación en los everglades
En los últimos días, el centro de detención, ubicado en los remotos Everglades de Ochoppe, Florida, ha sido el punto de partida para estos traslados masivos. El gobernador DeSantis confirmó el viernes 25 de julio de 2025 que los vuelos, operados por el Departamento de Seguridad Nacional, ya han reubicado a más de 100 migrantes hacia otros países, con expectativas de que esta cifra se incremente rápidamente.
La instalación, apodada “Alcatraz de los caimanes”, ha sido objeto de severas críticas. Organismos y defensores de derechos humanos la han condenado públicamente, calificándola de cruel e inhumana por las condiciones y el trato hacia los migrantes. Esta perspectiva genera una profunda preocupación en la comunidad internacional y en el círculo rojo de analistas.
Te puede interesar:Consulado México Laredo intensifica atención a migrantes por …
La defensa de la política migratoria de florida
Frente a las acusaciones, el gobernador Ron DeSantis y otros funcionarios estatales republicanos han salido en defensa del centro y de la operación de deportación. Argumentan que estas acciones forman parte de un esfuerzo agresivo del estado para respaldar la estrategia del presidente Donald Trump contra la inmigración irregular.
La postura de Florida subraya la creciente polarización en el país respecto a la política migratoria, con un enfoque en la disuasión a través de medidas de mano dura. La efectividad y la ética de estas políticas siguen siendo un punto central de análisis y debate, especialmente considerando las implicaciones humanitarias que conllevan.
Te puede interesar:Sheinbaum defiende a migrantes: su valor y la nueva política de …
La puesta en marcha de estos vuelos de deportación desde una instalación tan polémica como el “Alcatraz de los caimanes” plantea interrogantes críticos sobre la transparencia, la rendición de cuentas y el futuro de las políticas migratorias en Estados Unidos. ¿Hasta qué punto es sostenible una estrategia que genera tanta condena por su presunta inhumanidad?