Washington. El 17 de julio de 2025, el Departamento de Comercio informó que los consumidores estadunidenses aumentaron su gasto en junio, desafiando la ansiedad por los aranceles y la situación económica del país. Este repunte en las ventas minoristas marca un momento crucial en el panorama económico estadounidense.
Repunte inesperado en el gasto minorista
Las ventas minoristas aumentaron 0.6 por ciento en junio, una cifra mejor que la esperada, después de haber disminuido 0.9 por ciento en mayo, informó el jueves el Departamento de Comercio. Este incremento se produce tras una caída de 0.1 por ciento en abril, arrastrada por una fuerte disminución en la comercialización de automóviles.
Previamente, en marzo, los estadunidenses habían incrementado sus compras de autos para adelantarse al arancel de 25 por ciento impuesto por el presidente Donald Trump sobre los automóviles y piezas importadas. Excluyendo los automóviles y sus piezas, las ventas minoristas en junio también mostraron una fortaleza, registrando un aumento de 0.5 por ciento, según precisó el mismo informe del Departamento de Comercio.
Radiografía del consumo: sectores en alza
La tendencia de gasto mostró una fortaleza generalizada en diversos sectores. Las tiendas de ropa y accesorios registraron un notable aumento de 0.9 por ciento en sus ventas.
Asimismo, los restaurantes experimentaron un incremento de 0.6 por ciento, mientras que los minoristas en línea vieron un alza de 0.4 por ciento en sus transacciones.
La sombra de los aranceles y la inflación
Este panorama de crecimiento se desarrolla en un contexto de turbulencia económica, marcado por una frenética montaña rusa de aranceles que ha sacudido tanto a empresas como a hogares. Para las compañías, esta situación ha generado dificultades en la gestión de suministro e inventarios. Paralelamente, los hogares estadunidenses se han visto impulsados a enfocar su gasto en las necesidades básicas.
El informe más reciente del gobierno subraya esta presión, indicando que la inflación alcanzó su nivel más alto desde febrero el mes pasado. Esta escalada inflacionaria es atribuible a los amplios aranceles del presidente Trump, que han elevado los costos de una vasta gama de productos, desde comestibles y ropa hasta muebles y electrodomésticos.
Cautela del consumidor: un gasto estratégico
A pesar de las presiones, los estadunidenses continúan gastando, aunque con una creciente cautela. Una prueba clave de esta tendencia fue el evento Prime de Amazon, de cuatro días de duración, y las ventas minoristas competitivas de empresas como Walmart y Target, iniciadas la semana pasada.
Adobe Digital Insights, entidad que monitorea las ventas en línea, reportó que estas campañas generaron 24 mil cien millones de dólares en gastos en línea, lo que representa un significativo aumento de 30.3 por ciento en comparación con el mismo periodo del año anterior. No obstante, el proveedor de datos de consumidores Numerator, tras analizar los pedidos de Amazon Prime, señaló que los compradores priorizaron productos esenciales de menor precio, como jabón para platos y productos de papel, sobre artículos de alto costo.
La persistencia del gasto en Estados Unidos, aun bajo la sombra de la inflación y los aranceles, revela una economía resiliente pero con consumidores cada vez más estratégicos en sus decisiones de compra. ¿Cómo evolucionará este comportamiento a medida que las presiones económicas persistan?
