
Con una foto, un taco y una vieja frase reciclada, Donald Trump volvió a poner a México en el centro de su retórica de campaña. Esta vez, el 5 de mayo fue la excusa.
Trump revive su vieja postal del Cinco de Mayo: ¿mensaje de cercanía o burla estratégica?
Un tuit con historia: “¡Me encantan los hispanos!”
Este lunes, Donald Trump reutilizó una publicación de 2016 en su cuenta de X (antes Twitter) para celebrar el Cinco de Mayo. En la imagen, tomada durante su primer año de campaña presidencial, aparece sonriente junto a un plato de comida mexicana y el mensaje: “¡Feliz Cinco de Mayo! Los mejores tacos se preparan en Trump Tower Grill. ¡Me encantan los hispanos!”
El texto es el mismo que usó hace nueve años. Esta vez añadió: “Eso fue tan maravilloso hoy hace nueve años”. El gesto, aparentemente anecdótico, tiene una carga simbólica y política fuerte, especialmente cuando se vincula con su discurso actual sobre México, el narcotráfico y la frontera.
Cinco de Mayo: una fecha histórica en México, trivializada en EE.UU.
El 5 de mayo conmemora la Batalla de Puebla de 1862, cuando las tropas mexicanas derrotaron a las fuerzas francesas. En México, es una fecha relevante en términos históricos, pero no es feriado nacional. En cambio, en Estados Unidos ha sido apropiada culturalmente como una celebración de la herencia mexicana, aunque muchas veces con fines comerciales o folclóricos.
El uso del Cinco de Mayo como un guiño hacia la comunidad latina ha sido común en campañas políticas en EE.UU., pero en el caso de Trump, esa narrativa genera contradicciones, dadas sus posturas antimigrantes y sus constantes referencias negativas hacia México.
Trump, México y los hispanos: entre la contradicción y el cálculo electoral
El mensaje en contexto: nostalgia selectiva y populismo visual
La imagen de 2016, que reapareció en 2025, no es solo una foto casual. Es una herramienta visual cargada de simbolismo populista. Trump apela a la nostalgia de sus simpatizantes, mientras intenta suavizar su imagen ante votantes hispanos, un bloque electoral cada vez más estratégico en estados clave como Florida, Texas, Arizona y Nevada.
Pese a sus múltiples declaraciones despectivas hacia mexicanos y migrantes, Trump ha intentado construir una narrativa en la que él mismo se presenta como un aliado “auténtico” de la comunidad latina. Lo hace con gestos superficiales como comer tacos o usar frases en español, aunque sus políticas sugieren lo contrario.
Declaraciones recientes contra Sheinbaum refuerzan la contradicción
La reaparición del mensaje del Cinco de Mayo coincidió con nuevas declaraciones de Trump sobre México. Según afirmó en la misma red social, la presidenta mexicana Claudia Sheinbaum habría rechazado una propuesta suya para enviar tropas estadounidenses a combatir el narcotráfico.
Trump insinuó que Sheinbaum tiene miedo de los cárteles, sugiriendo que su negativa evidencia debilidad frente al crimen organizado. Esta afirmación eleva la tensión diplomática y refuerza el estereotipo que el expresidente ha promovido durante años: que México es sinónimo de drogas, violencia e ineficiencia.
Estrategia política: el voto latino como campo de batalla
¿Por qué hablar de tacos y cárteles al mismo tiempo?
Desde el punto de vista estratégico, revivir el tuit del Cinco de Mayo mientras critica a Sheinbaum no es casualidad. Trump entiende que debe mantener su base dura movilizada con retórica agresiva, pero también quiere captar un porcentaje del voto hispano que fue esquivo en sus campañas anteriores.
En elecciones donde cada punto porcentual cuenta, Trump está dispuesto a usar todas sus armas narrativas, incluso las más contradictorias. Al mismo tiempo que se muestra “culturalmente cercano”, endurece su discurso contra el gobierno mexicano.
El voto hispano: más diverso de lo que Trump cree
Uno de los errores frecuentes en las campañas republicanas es tratar al voto latino como un bloque homogéneo. Pero la comunidad hispana en EE.UU. es diversa, con diferencias regionales, ideológicas, lingüísticas y culturales. No todos celebran el Cinco de Mayo, ni todos interpretan como ofensivo el mensaje de Trump.
Sin embargo, en contextos electorales polarizados, gestos como este pueden activar reacciones en ambos sentidos: simpatía en algunos sectores conservadores latinos y rechazo en comunidades más críticas del trumpismo.
Una retórica que conecta con el Caribe Mexicano y el sur del país
Implicaciones para la región sureste de México
La narrativa de Trump sobre los cárteles tiene repercusión directa en estados como Quintana Roo, Yucatán y Campeche, donde la seguridad turística es un tema prioritario. Las referencias de Trump pueden afectar la percepción internacional del Caribe Mexicano, un destino que depende de la confianza del visitante extranjero.
Además, las tensiones con Sheinbaum —quien representa una continuidad del proyecto de López Obrador— podrían tener efectos en la cooperación bilateral en temas como migración, comercio, seguridad fronteriza y medio ambiente.
¿Qué puede aprender Sheinbaum de este episodio?
Para la presidenta de México, el reto está en responder sin caer en provocaciones, pero también sin dejar sin respuesta el discurso que afecta la imagen del país. Reforzar la soberanía sin aislar a México será clave, especialmente ante un posible regreso de Trump a la Casa Blanca.
Tacos, propaganda y la batalla por la narrativa
El regreso del tuit “¡Me encantan los hispanos!” no es inocente. Es un recordatorio de que, en tiempos electorales, cada símbolo cultural puede ser convertido en arma política. Trump no busca realmente celebrar el Cinco de Mayo, sino explotar su simbolismo para reconectar con votantes hispanos mientras intensifica su discurso contra México.
La tensión entre lo simbólico y lo real, entre la tortilla y la intervención militar, define buena parte del estilo comunicacional de Trump. Lo que para muchos es folclor, para él es propaganda.
En un contexto binacional cada vez más interconectado, episodios como este obligan a mirar más allá del tuit y entender lo que realmente está en juego: la narrativa hegemónica sobre México en el discurso público de EE.UU.