
La confrontación por el suministro de agua potable en San Agustín Tlaxiaca ha escalado a nivel nacional. Claudia Sheinbaum pide evitar la represión, mientras Conagua revisa las concesiones. ¿Qué está pasando realmente y cuáles son las posibles soluciones?
Crisis de agua en Tlaxiaca: Sheinbaum pide evitar represión
La presidenta de México, Claudia Sheinbaum Pardo, solicitó que no haya represión en San Agustín Tlaxiaca, luego de la confrontación entre habitantes y la presidencia municipal por el suministro de agua potable. Paralelamente, la Comisión Nacional del Agua (Conagua) anunció que está analizando las concesiones en este municipio.
“El objetivo es que haya agua, que le llegue a las personas. En algunos casos se está buscando que las administraciones municipales puedan ponerse de acuerdo con la autoridad estatal, porque las alcaldías no tienen suficientes recursos para atender plantas de tratamiento, de las cuales hay muchas que están en manos de los municipios pero no tienen los recursos para pagar electricidad”, destacó la mandataria durante conferencia en Palacio Nacional, este miércoles.
Sheinbaum también resaltó la necesidad de generar un esquema administrativo que garantice los recursos suficientes para la operatividad del sistema de agua potable. “En este caso (San Agustín Tlaxiaca) lo que hay que dar es información y que no haya represión”, dijo la mandataria. Esto se relaciona con nuestro análisis sobre la gestión de recursos hídricos en zonas urbanas [ver más aquí si el texto lo sugiere].
Conagua interviene en el conflicto
En respuesta a la crisis, la Conagua solicitó una revisión exhaustiva de los títulos de concesión y los antecedentes legales del sistema de agua potable de San Agustín Tlaxiaca.
Revisión de concesiones y posible acuerdo
Efraín Morales López, director general de Conagua, declaró: “La dirección local tiene instrucciones de que una vez que se termine esta revisión se pueda convocar a las partes para intentar establecer el acuerdo”.
Morales López recordó que la operación de agua potable y saneamiento es responsabilidad municipal. Sin embargo, en algunos casos, se crean organismos operadores que dan servicio a más de un municipio, mediante convenios entre alcaldías y las entidades. Esto se relaciona con nuestro análisis sobre la descentralización de servicios públicos en México [ver más aquí si el texto lo sugiere].
Antecedentes de la confrontación
La situación en San Agustín Tlaxiaca se agravó tras un zafarrancho en la alcaldía, donde vecinos rompieron cristales acusando la entrega del pozo La Trinidad a la Comisión de Agua y Alcantarillado de Sistemas Intermunicipales (Caasim).
Un día antes del incidente, el alcalde Mario David Medina Hernandez señaló que la asignación del volumen por parte de Conagua fue otorgada a Caasim, por lo que el municipio no ha sido titular del pozo. Además, la alcaldía detectó que se benefician sin pago alguno 4 mil 600 tomas, de las cuales 2 mil son clandestinas.
Medina Hernandez también expuso que los costos de operación, 22 millones de pesos, no pueden ser cubiertos por el municipio, destacando la colaboración con Caasim para beneficiar a las familias de Tlaxiaca.
Tecnificación del campo
Adicionalmente, la Conagua informó que en las próximas semanas publicará los procesos de licitación para la tecnificación del campo de los distritos de riego 003 Tula, 100 Alfajayucan y 112 Ajacuba. Se espera que las obras en estas tres demarcaciones inicien en octubre.
El director general de Conagua detalló que, además de tecnificar el campo e incrementar la producción agrícola, parte del agua que se ahorre en los procesos de producción será destinada al consumo humano.
¿Podrá la intervención de Conagua y la tecnificación del campo resolver la crisis hídrica en Tlaxiaca y garantizar el suministro de agua a la población? La respuesta a esta interrogante definirá el futuro de la región.