Por Gabriel Alcocer/NOTICARIBE PENINSULAR
CANCUN.- Las agresiones contra taxistas se incrementaron en los últimos días, en una situación que podría estar relacionada con el control que busca un grupo delictivo para cobrar derecho de piso a todos los agremiados.
En medio de esta campaña de terror, dos taxistas, uno de Cancún y el otro de Isla Mujeres, fueron ejecutados a balazos el sábado pasado.
Uno de los operadores, con el uniforme del sindicato de Cancún, fue privado de su libertad, presuntamente en un sitio de la zona hotelera y después fue llevado a la autopista hacia Mérida, donde fue ejecutado.
El taxista de Isla Mujeres fue baleado en el interior de su unidad de trabajo en la entrada de la avenida Ramal Norte, a la altura de la Región 260.
Después, la noche del domingo un taxi fue abandonado al final de la avenida Bonampak, con dos hombres y una mujer en el interior, quienes presentaban lesiones por golpes y recibieron el auxilio de paramédicos para su traslado a un hospital.
En el transcurso de la madrugada del lunes, un taxi estacionado recibió múltiples impactos de bala como una posible señal de advertencia y, de hecho, los agresores dejaron una cartulina con amenazas.
Algunas versiones indican que en días pasados los socios del sindicato de taxistas de Cancún fueron amenazados para depositar una cantidad de dinero, para que un grupo delictivo permita que sus unidades continúen laborando.
De hecho, en meses anteriores, los taxistas recibieron amenazas para dejar de laborar hasta ciertas horas de la noche.
Esta situación se suma a los ataques recientes contra las unidades de transporte colectivo de Maya Caribe y Transporte Terrestre Estatal.
