Agencias
TULUM.- La mañana de este viernes más de 300 taxistas se manifestaron en la entrada principal de Tulum para exigir la liberación de Eliazar Sagrero, secretario general del Sindicato “Tiburones de Quintana Roo”, quien fue capturado por la Fiscalía General del Estado por los delitos de homicidio calificado y tentativa de homicidio en agravio de cuatro personas.
Los manifestantes se reunieron a eso de las 8 de la mañana, a la altura de la Zona Arqueológica de Tulum, para mostrar pancartas de apoyo y afirmar que su líder sindical es inocente y un “preso político”.
En ese contexto, los taxistas señalaron que la detención de su líder sindical, quien también es regidor electo por el PT, forma parte de una estrategia del gobierno para debilitar a este gremio.
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“Estamos aquí para exigir justicia y la liberación de Eliazar. Esta detención es un acto de represión contra nuestro sindicato y no lo vamos a permitir”, declaró una de los manifestantes.
Además, los taxistas afirmaron que continuarán con su protesta hasta que Eliazar Sagrero sea finalmente liberado, con el previo retiro de los cargos que se le imputan.
Cabe mencionar que la captura de Eliazar Sagrero tuvo lugar ayer en la cabecera de Tulum, tras el cumplimento de una orden de aprehensión que fue girada por un juez de control.
Durante su captura, fue arrestada también otra persona, identificada como Juan Manuel “N”.
Según el comunicado emitido ayer por la Fiscalía, a ambos sujetos les aseguraron un arma de fuego calibre 380 milímetros.
Advierte Sindicato una “escalada de nuevas dimensiones”
El sindicato de taxistas “Tiburones de Quintana Roo”, emitió anoche el siguiente comunicado:
*Detención del Líder Sindical Taxista en Quintana Roo: Un Golpe Político Orquestado por el Gobierno Estatal en Medio de la Controversia por la Entrada de Uber y la Exigencia de Mejora Tarifaria*
*Tulum, Quintana Roo – 28 de Agosto de 2024* – En un giro alarmante de los acontecimientos, el líder sindical de los taxistas de Quintana Roo fue detenido en lo que muchos miembros del gremio y analistas políticos consideran un golpe político claramente orquestado por el gobierno estatal. Esta acción se produce en medio de una creciente controversia por la entrada de Uber al estado y la demanda largamente insatisfecha de un alza en las tarifas del transporte público, que no han sido revisadas en los últimos nueve años, dejando a los taxistas en una situación de precariedad económica.
El arresto del líder sindical, cuya detención es claramente una falsa de los cargos que se le acusan ha sido interpretado por muchos como un intento de silenciar una voz fuerte y consolidada que ha luchado incesantemente por los derechos de los trabajadores del volante en Quintana Roo. Desde hace años, el sindicato ha exigido la actualización de las tarifas de transporte público para reflejar los aumentos en los costos de operación, incluidos combustibles, mantenimiento y seguro, en un esfuerzo por asegurar un ingreso digno para los taxistas.
La entrada de Uber al mercado quintanarroense, aprobada por el gobierno estatal, ha añadido combustible al fuego, exacerbando la ya tensa relación entre los sindicatos de taxistas y las autoridades. Los líderes sindicales han señalado que la llegada de esta plataforma de transporte representa una amenaza directa para los ingresos de miles de familias que dependen del servicio de taxi, considerando que los operadores de Uber no están sujetos a las mismas regulaciones ni costos que los taxistas tradicionales.
Varios miembros del gremio han expresado su preocupación por lo que consideran una campaña sistemática de desestabilización dirigida a quebrar la fuerza del sindicato y abrir completamente el mercado al servicio de Uber sin negociar las condiciones necesarias para proteger a los trabajadores del sector. Este arresto, según ellos, es un ejemplo claro de la represión que el gobierno estatal está dispuesto a emplear para avanzar en su agenda, ignorando las demandas legítimas de los taxistas.
*Una Larga Lucha por Justicia Tarifaria*
La exigencia de un alza en las tarifas no es nueva. Durante casi una década, los taxistas han pedido una revisión justa de las tarifas para poder cubrir los crecientes costos de operación. Sin embargo, las autoridades han hecho caso omiso de estas solicitudes, manteniendo las tarifas en niveles que muchos consideran obsoletos e insuficientes. Esta negativa a ajustar las tarifas, sumada a la reciente entrada de Uber, ha generado una tormenta perfecta que ha culminado en la detención del líder sindical.
*Reacciones del Gremio y del Público*
La detención ha provocado una oleada de indignación entre los taxistas y ha despertado la preocupación de varios sectores de la sociedad, quienes ven en este acto una peligrosa tendencia hacia la criminalización de la protesta y la defensa de derechos laborales. Los taxistas han anunciado que no permanecerán en silencio y que están considerando varias medidas de presión, que podrían incluir movilizaciones masivas en todo el estado, en defensa de su líder y de sus derechos.
Por su parte, el gobierno estatal ha defendido la legalidad del arresto, argumentando que se basa en supuestas irregularidades que están siendo investigadas. Sin embargo, muchos siguen convencidos de que esta es una maniobra política para debilitar al sindicato en un momento crítico.
*Conclusión*
Este evento marca un punto de inflexión en la lucha de los taxistas de Quintana Roo. El gremio se enfrenta ahora no solo a la competencia desleal de Uber, sino también a lo que consideran una persecución política por parte del gobierno. La respuesta del sindicato y del público en general en los próximos días será crucial para determinar el rumbo de esta disputa que promete escalar a nuevas dimensiones
SIM
