
Francisco Javier Robles/NOTICARIBE PENINSULAR
CANCÚN.- ¡Dobló las manos el gremio taxista de Cancún! Aceptó públicamente el ingreso de Uber a Quintana Roo, y se limitó a exigir que comience operaciones hasta formalizar su regularización local, como ya se ha anunciado. «Vamos a ser responsables y respetuosos».
Esta tarde de viernes, el sindicato de taxistas «Andrés Quintana Roo» ofreció una conferencia de prensa en la que «extrañamente» no participó el secretario general Heriberto Nuñez Cahuich -cuando todos esperaban su postura- y sólo estuvieron presentes Rubén Carrillo, secretario del Interior; Ruth Salazar, secretaria general adjunta, y Jonathan Pineda Castro, responsable jurídico del sindicato.
Pidieron al Gobierno del Estado e Instituto de Movilidad que se aplique la ley vigente a los operadores de Uber sorprendidos ofreciendo servicio de transportación, mientras no exista la nueva norma regulatoria (lo que ya han explicado las autoridades).
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«No desaparece la facultad del Estado de regularlos, y la autoridad debe de precisar los efectos y mandato a seguir. Transportar a una persona de un lugar a otro, obligatoriamente debe de estar regulado. Le parezca o no a la plataforma, tiene que sujetarse sea público, privado o tolerado», precisó el abogado, «¡No hay trajes a la medida para nadie!».
El secretario del interior, Rubén Carrillo, informó que siguen trabajando en la estrategia legal, «porque nuestra batalla apenas empieza», y advirtió que continuarán impidiendo que la aplicación preste servicio; además, tomarán como provocación que operen en el municipio Benito Juárez sin la nueva regulatoria.
En el marco de la comparecencia ofrecida en el auditorio del Andrés Quintana, socios y operadores aseguraron que solamente este jueves, Uber dio de alta a 200 operadores en Cancún y 300 en Playa del Carmen.
«El botín de ellos será la Riviera Maya, esa es su tirada, quedarse con la Riviera Maya.¡Ya nos chingamos!», Exclamaron molestos.