Mario A. Millán Cabrera/NOTICARIBE PENINSULAR
El primer año de ejercicio constitucional de la XVII Legislatura del Congreso del Estado está a punto de llegar a su fin, lo que conlleva obligadamente a renovar la presidencia de la Junta de Gobierno y Coordinación Política (JUGOCOPO), hasta ahora a cargo del joven cozumeleño Renán Eduardo Sánchez Tajonar.
Se acaban los privilegios para unos y empiezan las bondades para otros. Sánchez Tajonar prácticamente tuvo un paso gris como presidente de la JUGOCOPO, afortunadamente no tuvo que lidear con los coordinadores de las fracciones parlamentarias porque un hubo necesidad de ello, sí, no hubo, porque la diputación está integrada por una mayoría morenista y verde que dominan, junto con sus aliados petistas, cuanta propuesta sea presentada aprovechando, por supuesto, que no hay bloque opositor; el PAN, el PRI y el resto de los partidos pasan desapercibidos, aunque en ocasiones los únicos que levantan la mano y toman tribuna para debatir son Cinthya Millán Estrella y Julián Ricalde Magaña, pero hasta ahí, nada más.
La Ley Orgánica del Poder Legislativo, la que se dijo sería innovada, perfeccionada y hasta que sería ejemplo nacional, establece que la Junta de Gobierno y Coordinación Política será presidida, de manera escalonada (anualmente) durante el periodo constitucional de la legislatura, por el partido político que tenga mayoría representativa, es decir, de mayor a menor.
A la XVII Legislatura le tocaron escasamente dos años de vida constitucional por las reformas a la Ley Electoral de Quintana Roo, la cual se emparejó con la reglamentación nacional para homologar los procesos electorales con las entidades federativas.
Por acuerdos o negociaciones políticas, el partido Verde, por medio de Sánchez Tajonar, inició en la presidencia de la JUGOCOPO, por lo que ahora, en este segundo y último año de ejercicio constitucional, le corresponde a Morena asumir el control del gobierno legislativo, los recursos humanos y financieros.
El diputado cancunense Humberto Aldana Navarro, es el coordinador de la bancada morenista en el Congreso del Estado, a él le correspondería asumir la presidencia de la JUGOCOPO en el próximo período ordinario de sesiones que inicia el 3 de septiembre; sin embargo, el morenista encargado de “esclarecer” todas las tropelías cometidas por los anteriores gobernantes que concesionaron el servicio de agua potable a la empresa Aguakan por más de 50 años, tiene otras aspiraciones políticas como ser candidato al Senado de la República para el proceso electoral del 2024.
Esto significa que, si asume la JUGOCOPO, estaría pidiendo licencia más adelante y, en consecuencia renunciando a esa envidiable posición.
Pero como en política nada está escrito, Aldana Navarro podría quedarse “milando como el chinito”, porque la presidencia de la JUGOCOPO la podría asumir, con la mano en la cintura, la diputada morenista Mildred Ávila Vera, quien se ha dedicado a realizar un verdadero trabajo de consenso legislativo y, sobre todo, a sacar adelante las iniciativas de ley más importantes para el gobierno de Mara Lezama, como es el caso de la Ley de Movilidad y la Ley de Seguridad Ciudadana, sin olvidar las reformas a la Ley Orgánica de la Administración Pública que dieron pie al surgimiento de la Secretaría del Bienestar y de la Agencia de Seguridad Alimentaria.
Además, contrario al diputado Aldana, Ávila Vera mantiene una relación muy estrecha con la gobernadora, se identifican, son mujeres de carácter que toman decisiones sin temblarles la mano.
Mara Lezama es la primera mujer en gobernar Quintana Roo y eso ha dado pie para abrir las puertas de su gobierno a las mujeres; en su gabinete hay más mujeres que hombres y siete de once municipios son gobernados por ellas. Y ni que decir del Congreso del Estado, donde sólo hace falta una mujer que presida la Junta de Gobierno y Coordinación Política. Nos leemos en la próxima entrega.
