Alejandro Peza/CARIBE PENINSULAR
CHETUMAL.- Productores cañeros del sur de Quintana Roo informaron que se mantiene el bloqueo en los accesos del ingenio San Rafael de Pucté, además de que por ahora no existe ningún avance en las negociaciones con la directiva del corporativo Beta San Miguel, a la cual acusan de intentar imponer un crédito “abusivo e injustificado” como condición para arrancar la zafra 2025–2026.
Los productores denunciaron que el corporativo aprobó un crédito de 25 pesos por tonelada de caña, con una tasa de interés del 16 por ciento y cargos adicionales. El apoyo se ofreció únicamente a 600 agricultores que representan alrededor del 30% del padrón de dos 500 cañeros pese a que las organizaciones solicitaron en Ciudad de México un financiamiento de 50 pesos por tonelada, sin intereses y para todos los participantes.
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Los dirigentes, Sergio Crisanto Mortero y Benjamín Gutiérrez Reyes, acusaron que la decisión se tomó sin consultar al sector. Advirtieron que el esquema representa un retroceso frente a acuerdos previos y afecta directamente la economía de las familias productoras.
Los representantes de las organizaciones cañeras señalaron que, pese a los llamados al diálogo, la empresa no ha modificado su postura respecto al crédito que pretende cargar a los productores y que, aseguran, no fue consensuado ni corresponde a necesidades reales del campo cañero. Ante ello, los inconformes comenzaron la madrugada del lunes un bloqueo total de las operaciones del ingenio, que continúa sin interrupciones.
Para sostener la protesta, los productores han implementado un sistema organizado de vigilancia. De acuerdo con los dirigentes, cada uno de los 15 ejidos abastecidos por el ingenio está enviando a cinco productores por turno para mantener presencia constante en los accesos.
Las guardias se están realizando en bloques de 12 horas, con relevos establecidos para evitar el desgaste de los participantes y asegurar que el movimiento permanezca activo mientras no haya una solución favorable. Los cañeros explicaron que esta estrategia permite mantener el control de las entradas al ingenio y evitar que se reanuden actividades sin autorización.
Los productores reiteraron que no están en disposición de iniciar la zafra mientras la directiva del ingenio insista en aplicar el crédito que, según señalan, incrementaría injustificadamente los costos de producción y afectaría gravemente la economía de las familias cañeras.
Indicaron que la petición es la de retirar completamente el crédito y establecer un diálogo real, donde se analicen las necesidades del sector y se respeten los acuerdos establecidos en ciclos anteriores.
Un dato importante es que el bloqueo ha comenzado a generar preocupación entre transportistas, proveedores y trabajadores eventuales que dependen del arranque de la zafra. Sin embargo, los productores insisten en que la medida es necesaria para evitar que se consoliden prácticas que consideran lesivas para el campo cañero.
