La presidenta Claudia Sheinbaum Pardo respondió con firmeza a las declaraciones del abogado de Ovidio Guzmán, Jeffrey Lichtman. Desde Culiacán, Sinaloa, Sheinbaum niega contubernios con el crimen organizado y defiende la actuación del gobierno frente al acuerdo judicial alcanzado en Estados Unidos. Convocó a una inédita conferencia de prensa fuera de protocolo.
La respuesta presidencial desde Sinaloa
La titular del Ejecutivo calificó las declaraciones de Jeffrey Lichtman, abogado de Ovidio Guzmán, como totalmente irrespetuosas de la institución presidencial. Lichtman criticó a la mandataria federal por, supuestamente, quejarse de que el gobierno de México no participó en las negociaciones de la declaración de culpabilidad de su cliente con Estados Unidos.
“No tenemos relaciones de contubernio ni complicidad con nadie”, afirmó la presidenta desde Culiacán. Subrayó que el pueblo de México lo sabe.
Desde temprano, en la mañanera, la presidenta ya había cuestionado la falta de coherencia de Estados Unidos al negociar con quienes denomina terroristas. Reiteró al gobierno de Donald Trump su exigencia de informar cómo se dio la captura de Ismael El Mayo Zambada en El Paso, Texas, tras casi un año de su traslado, sugiriendo una posible traición por parte de Joaquín Guzmán López, hermano de Ovidio. “Nosotros no defendemos a ningún miembro de delincuencia organizada”, sentenció.
El contexto judicial del caso Ovidio Guzmán
Tras la declaración de culpabilidad de Ovidio Guzmán en Chicago por cargos vinculados con narcotráfico, Sheinbaum Pardo manifestó que se trata de un asunto de la Fiscalía General de la República, no del gobierno.
“Es una relación directa entre el Departamento de Justicia y la FGR”, puntualizó. Recordó que Ovidio Guzmán tenía una orden de aprehensión en México y fue extraditado a Estados Unidos, siendo la FGR la entidad involucrada en el proceso.
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El acuerdo de culpabilidad bajo la figura de asistencia sustancial, al que llegó El Ratón, está establecido en las leyes y el acuerdo de extradición entre Estados Unidos y México tiene una serie de reglas. La presidenta resaltó que en ese marco, la FGR trabaja con el Departamento de Justicia, aunque consideró que es la FGR quien debe dar la explicación pertinente sobre dicho acuerdo.
Seguridad y presencia federal en Sinaloa
De gira por Culiacán, ciudad que en los últimos meses ha sufrido las consecuencias de la violenta confrontación entre Los Chapitos y Los Mayos, la presidenta puntualizó que hará todo para regresar la paz al estado.
“Nunca vamos a dejar solo al pueblo de Sinaloa (…)”, expresó. “No nos pueden vencer, vamos a salir adelante.”
Refuerzo en la seguridad
La presidenta resaltó que en una reunión del gabinete de seguridad se acordó brindar apoyos adicionales a Sinaloa. Uno de ellos es la presencia constante de altos mandos federales.
- Titular de Seguridad y Protección Ciudadana, Omar García Harfuch.
- Titular de la Defensa Nacional, general Ricardo Trevilla Trejo.
- Titular de la Marina, almirante Raymundo Morales Ángeles.
Estos funcionarios estarán en Sinaloa por lo menos una vez cada 15 días para dar el apoyo necesario a la ciudadanía, según lo anunciado.
Más tarde, durante la inauguración de áreas médicas del Hospital Pediátrico IMSS-Bienestar Sinaloa, la mandataria aseveró que “se quedarán con las ganas quienes quieren que el gobierno de la Transformación fracase.”
La contundencia de la presidenta desde Sinaloa subraya no solo la distancia que busca marcar con las insinuaciones del abogado de Ovidio Guzmán, sino también un mensaje de firmeza en un estado marcado por la violencia faccional del crimen organizado. ¿Será suficiente la presencia militar para pacificar una región con conflictos tan arraigados?
