La Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) se encuentra en el centro de un nuevo debate político, luego de que la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo cuestionara la decisión de los ministros salientes de convocar a una última sesión extraordinaria, apenas días antes de la llegada de la nueva corte que definirá la reforma judicial México 2025.
Sheinbaum cuestiona maniobras de la SCJN saliente
La presidenta Claudia Sheinbaum Pardo, desde Palacio Nacional, ha exhortado públicamente a los ministros de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) a explicar los motivos detrás de la convocatoria a una sesión extraordinaria final. Esta reunión, programada para el 19 de agosto con posible extensión hasta el 28, precede a la partida de los actuales ministros, quienes dejarán sus cargos el 31 de agosto. Sheinbaum remarcó que «lo cierto es que ya se van», enfatizando que la llegada de los nuevos ministros, elegidos tras la reciente elección judicial, traerá un muy necesario «aire fresco» al Poder Judicial.
El llamado a una sesión crucial antes del cambio
La mandataria federal criticó la determinación del máximo tribunal de convocar a esta sesión, preguntándose públicamente: «¿Qué sentido tiene?». Sheinbaum sugirió una posible motivación oculta detrás de esta reunión urgente. “Habría que preguntar por qué quieren una sesión extraordinaria, a lo mejor van a resolver el tema de los impuestos de una persona que debe mucho”, cuestionó la presidenta, señalando una posible agenda que podría favorecer intereses particulares. Además, la jefa del Ejecutivo insinuó una preocupación mayor: “¿O qué? ¿A poco hasta el último momento van a querer echar atrás la reforma al Poder Judicial?”. Estas declaraciones subrayan la tensión existente entre el Poder Ejecutivo y la saliente cúpula judicial, en un contexto de transformaciones profundas.
Presupuesto judicial: Entre el aumento y la nueva era
Otro punto de fricción ha surgido en torno al anteproyecto de presupuesto para 2026, aprobado en una sesión privada de la Corte, que previamente había sido planificada como la última. Este documento contempla un incremento global del 12.7 por ciento en comparación con 2025, equivalente a 5 mil 869 millones 743 mil 404 pesos. El anteproyecto, presentado a los ministros apenas el viernes pasado, será remitido al Congreso para su aprobación final.
Un incremento de 5.8 mil millones bajo escrutinio
Ante el elevado monto propuesto, la presidenta Sheinbaum fue categórica: “Del presupuesto, no, pues no”. La mandataria reiteró que con la llegada de la nueva Corte, los ministros no podrán percibir salarios superiores a los de la presidenta de la República, un principio que «ya lo dice claramente la Constitución». Esta crítica se alinea con las declaraciones del jefe de Gobierno de la Ciudad de México, Martí Batres, quien previamente señaló que la SCJN saliente «pretende heredar los altos salarios».
La constitución y los salarios de la nueva corte
Sheinbaum insistió en que «aprobaron un presupuesto altísimo», pero confía en que la «nueva Corte» y el «aire fresco» que llega al Poder Judicial permitirán una revisión profunda de este anteproyecto. Los nuevos ministros y ministras, quienes entrarán en funciones el 1 de septiembre, «no tienen por qué no revisarlo», afirmó la presidenta, dejando claro que las decisiones de la administración saliente estarán sujetas al escrutinio de los recién llegados. Esta transición en la SCJN promete ser un punto de inflexión para el futuro de la justicia en México, con implicaciones directas en la autonomía presupuestaria y la agenda legislativa venidera.