
El Senado de la República aprobó una reforma clave que transforma el panorama de la competencia económica en el país. El 28 de junio de 2025, se decidió eliminar la Comisión Federal de Competencia Económica (Cofece) para dar paso a la nueva Comisión Nacional Antimonopolio. Esta acción marca un hito en la política nacional.
El Voto y los Argumentos a Favor
La reforma, en materia de simplificación administrativa, fue aprobada en lo general por 68 votos a favor y 35 en contra. El morenista Emmanuel Reyes, presidente de la Comisión de Economía, presentó el dictamen destacando las características de la recién creada Comisión Nacional Antimonopolio.
Según Reyes, la nueva instancia:
- Está sectorizada a la Secretaría de Economía.
- Funciona como un organismo descentralizado.
- Es colegiado y con experiencia.
El legislador de Guanajuato resaltó que esta estructura fortalece la rectoría del Estado en el sector. Adicionalmente, señaló que el nuevo organismo tendrá mecanismos de coordinación con la Comisión Reguladora de Telecomunicaciones en vía de creación, la cual asumirá funciones del Instituto Federal de Telecomunicaciones, incluyendo autorizaciones del espectro radioeléctrico y órbitas satelitales, así como concesiones. Reyes afirmó que con la nueva comisión antimonopolios se cumple cabalmente con el artículo 21 del T-MEC, referido a la política de competencia.
La Dura Crítica de la Oposición
La reforma no estuvo exenta de fuertes señalamientos por parte de la oposición. El panista Marko Cortés atribuyó la desaparición de la Cofece a una supuesta “venganza” de Morena, derivada de la postura del organismo contra la reforma energética del ex presidente Andrés Manuel López Obrador.
Cortés fue enfático al señalar la supuesta falta de autonomía de la nueva instancia:
- Afirmó que la Comisión Nacional Antimonopolio “tristemente ya no tiene absolutamente nada de autónoma”.
- Consideró que la convirtieron en “el brazo operador de la presidenta de la República en materia de competencia”.
Como sustento de su argumento, explicó que la titular de la presidencia nombrará directamente a quien presida la nueva instancia, eliminando la participación del Senado en este nombramiento, y se suprimió el Comité de Evaluación de los comisionados.
Por su parte, el priísta Miguel Ángel Riquelme calificó la reforma como “profundamente regresiva”. Argumentó que, bajo el “falso argumento de la simplificación administrativa”, se ponen en riesgo décadas de avances en competencia económica. Riquelme advirtió que, sin autonomía real, las decisiones de la nueva comisión podrían verse condicionadas por intereses políticos, reduciendo su capacidad de sancionar abusos.
El Proceso Legislativo Continúa
La iniciativa que modifica la Ley Federal de Competencia Económica y la Ley Federal de Entidades Paraestatales fue aprobada en lo particular por 72 votos a favor y 34 en contra. Concluido su paso por el Senado, el documento fue turnado a la Cámara de Diputados para su análisis y votación, donde continuará el proceso legislativo.
La aprobación de esta reforma en el Senado abre un nuevo capítulo en la regulación de la competencia económica en México, marcado por profundas diferencias en la visión sobre el papel y la autonomía del Estado en este ámbito. ¿Cuál será el impacto real de esta transformación en el mercado y la economía del país?