
Tras casi tres décadas de incansable lucha, el pueblo Wixárika está a la espera de una decisión histórica en París. La UNESCO resuelve este fin de semana si la Ruta Wixárika por sus sitios sagrados a Wirikuta se inscribe como patrimonio mundial, un testimonio invaluable de persistencia cultural ante amenazas.
La decisión histórica en París
Este fin de semana se resuelve en París la inscripción de la ruta por los sitios sagrados a Wirikuta en la lista de patrimonio mundial de la Organización de Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco). El proyecto de resolución de la sesión 47 del Comité del Patrimonio Mundial destaca el itinerario sagrado Tatehuarí Huajuyé (El camino de nuestro abuelo Fuego).
Se subraya que es una de las rutas precolombinas aún en uso más representativas en América. Es un testimonio excepcional de la persistencia de las tradiciones culturales del pueblo Wixárika. También es un ejemplo excepcional de la interrelación entre cultura y entorno natural en las prácticas espirituales de ese pueblo originario.
El análisis final de la propuesta está agendado para hoy, alrededor de las 10 horas de México. La serie de 20 partes componentes abarca un corredor de más de 500 kilómetros por los estados de Nayarit, Jalisco, Zacatecas, San Luis Potosí y Durango. Asisten representantes del Consejo Regional Wixárika para la Defensa de Wirikuta y sus Lugares Sagrados, Santos de la Cruz y Totupica Candelario.
El valor universal excepcional de la ruta
El Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) ha difundido el valor universal excepcional de la ruta Wixárika. Este se basa en la vinculación de los sitios sagrados con elementos fundamentales de esa tradición, como el fuego, la lluvia, el maíz, el peyote, el águila real, el lobo o el venado. Esta vinculación se da a través de actividades rituales tradicionales y sofisticadas que abarcan el cultivo, la caza, la recolección y la pesca.
La combinación de peregrinaciones ceremoniales a sitios sagrados naturales, prácticas agroforestales ancestrales, arquitectura vernácula y modelos arquitectónicos de templos constituye un testimonio vivo excepcional. También se incluyen los ciclos rituales que giran en torno al cultivo del maíz Wixárika. Todo ello representa modelos culturales milenarios de Mesoamérica.
Amenazas persistentes: minería, turismo y más
El proyecto de resolución advierte que estas áreas podrían verse sometidas a importantes presiones. La minería, la urbanización, el uso de tierras privadas y un turismo culturalmente inapropiado representan amenazas significativas.
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En particular, se menciona el riesgo relacionado con el consumo de peyote en el contexto turístico. En entrevista, Francisco Vidargas, titular de la Dirección de Patrimonio Mundial del INAH, refirió la preocupación Wixárika por desarrollos turísticos. El riesgo de este turismo inadecuado se ubica más cercano a Real de Catorce.
Vidargas resaltó los intereses económicos que afectan Wirikuta, sobre todo de mineras y terratenientes. Indicó que en la Sierra Madre Occidental, donde están las comunidades importantes en Jalisco, la propiedad de la tierra ha provocado asesinatos de líderes Wixárikas que defienden su territorio en años pasados.
Esfuerzos de protección y gestión
La iniciativa para la inscripción surgió hacia finales del siglo pasado. Su fortaleza ha sido la preponderante participación de las comunidades Wixaritari. Han sido respaldadas por los gobiernos federal, a través del INAH, y estatales vinculados.
Se establecerá una Unidad de Manejo para coordinar la gestión del bien serial. Implementará el Plan Integral de Manejo, Conservación y Salvaguardia (2024-2030) con enfoque biocultural. Existe un sistema de protección y monitoreo administrado por el Consejo Regional Wixárika.
Una demanda clave de los Wixaritari fue proteger la ruta del vandalismo. Está formada por elementos muy pequeños y frágiles, como un riachuelo o un montículo, y algunas construcciones como en Cerro Gordo. En la isla en San Blas, un sitio sagrado puede ser un cerro, un árbol o una piedra.
Sitios ceremoniales se encuentran inmersos en el gran paisaje natural. Carecen de protección o cercados. Algunos están dentro de propiedades privadas, aunque los dueños permiten el tránsito y las ceremonias.
La relevancia del nombre: Wixárika vs Huichol
La propuesta se inscribió inicialmente como “Ruta Huichol por los sitios sagrados a Huiricuta”. Se prevé que el título sea modificado con apoyo de un país con voz y voto en el Comité del Patrimonio Mundial. El objetivo es que se registre como “Ruta Wixárika por los sitios sagrados a Wirikuta”. Vidargas expresó que es de elemental justicia nombrar correctamente el sitio y al pueblo.
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Cronología y contexto político
En 2023, el entonces presidente Andrés Manuel López Obrador firmó un decreto que prohíbe a las mineras continuar la explotación en cinco sitios sagrados. Estos sitios incluyen Cerro Gordo, en Durango, y San Blas, en Nayarit, parte de la ruta propuesta. Este decreto se vincula a la creación del Plan de Justicia Wixárika, O’dam-Au’dam, Náayeri y Mexikan.
El abogado Santos de la Cruz afirma que la postulación para incluir la ruta sagrada en la lista de la Unesco “emerge de los centros ceremoniales de nuestro pueblo”.
La inscripción de la Ruta Wixárika como patrimonio mundial es un triunfo largamente buscado, un reconocimiento a la resiliencia de un pueblo. Sin embargo, las amenazas latentes de minería, turismo descontrolado y el uso de la tierra privada persisten. ¿Será suficiente la declaratoria de la Unesco para garantizar la salvaguardia efectiva de este legado milenario?