¿Dónde se sustenta el bipartito Morena–PVEM en Quintana Roo?
La alianza entre guindas y verdes no es un acuerdo local. Para nada. Es un amarre nacional, cocinado desde Ciudad de México.
El PVEM le dio diputados federales a Andrés Manuel López Obrador y a Morena, suficientes para que el Presidente alcanzara las mayorías necesarias en el Congreso de la Unión.
Sin el Verde, Morena no habría conseguido ni siquiera una mayoría absoluta (50 + 1). También fue clave el respaldo verde para controlar los órganos de gobierno de la Cámara de Diputados.
En esos acuerdos, Quintana Roo terminó siendo una ficha de cambio. El gobierno bipartido en el Caribe, incluido el reparto de posiciones clave como la Fiscalía General del Estado (FGE) o la Secretaría de Bienestar (Sebien) son parte de esos compromisos entre las altas cúpulas de los dos partidos.
Mientras Morena necesite al PVEM, se mantendrán los acuerdos. Incluso pueden ensancharse.
Pero parece que al Verde ya no le está yendo tan bien a nivel nacional. En las encuestas, sus números van en picada.
Por ejemplo, en el último estudio de la encuestadora Territorial, el PVEM aparece en último lugar: tiene apenas 4.1% de las preferencias, incluso por debajo del PT, que suma 4.8%.
Sí, en Quintana Roo el Verde tiene 22% o 17%, según el sondeo. Pero no es tan relevante, porque la oposición es prácticamente inexistente. MC, PAN y PRI juntos no alcanzan ni 25 puntos. El PVEM no es indispensable.
La verdadera mesa de acuerdos está en la capital del país.
Ahí se definirá si Morena necesitará al PVEM para mantener la mayoría en 2027… y si, a cambio, se refrendará el caso Quintana Roo.