Lo ocurrido en la Secretaría de Ecología y Medio Ambiente (SEMA) no parece ser casualidad.
El presidente Andrés Manuel López Obrador ha dado un no rotundo las energías limpias y renovables a efecto de fortalecer a las paraestatales CFE y Pemex.
Según los detractores del Presidente, la ecuación de AMLO es simple. El combustóleo que produce Pemex y nadie quiere, lo “comprará” la CFE para producir energía, por cierto, nada limpia.
En cambio, los gobernadores están a favor de las energías limpias, lo que además implica la participación de la iniciativa privada, en este sector en expansión.
Y en medio de esta discusión, el Gobierno de Quintana Roo le ha sumado las tarea de promoción de energías limpias y renovables a SEMA.
Pero, además, el nueva titular de SEMA es Efraín Villanueva Arcos, que, en el sexenio de Enrique Peña Nieto, fue director general de Energías Limpias de la Secretaría de Energía (SENER).
Por cierto, desde hace algún tiempo está la inquietud de inversiones privados para un campo energía eólica en Cozumel.
