No es un secreto que la base electoral del titular de la ANAM, Rafael Marín, son los morenas fundadores y/o “puros”.
La presidenta municipal de Felipe Carrillo Puerto, Mary Hernández, ya deslizó que más que con Eugenio “Gino” Segura, está con “Rafa” Marín.
Mary representa al morenismo fundador, aunque haya llegado poquito después,
Como se sabe, tras casi dos trienios como alcaldesa y uno más como regidora, Mary ya está más que apuntada para la candidatura de Morena a diputada federal, y su principal oponente es su homólogo de Tulum, Diego Castañón, que cuenta con pesos pesados de la nomenklatura cuatroteísta como Ricardo Monreal, Manuel Velasco y Pedro Haces.
De pilón, hay que incluir a la alcaldesa de Chetumal, Yensunni Martínez, a quien no se le niegan sus antecedentes de fundadora ni el haber llegado a Morena cuando el partido apenas era una promesa.
Peor aún —para desgracia de los principios del movimiento—, las excuñadas Hernández y Martínez son de las alcaldesas peor evaluadas del estado.
Si bien son fundadoras, ni Mary ni Yensunni estarán en condiciones de favorecer a «Rafa», «Gino» o quien sea.
Y como diría el clásico: en política hay sumas que restan.
