El sistema financiero mexicano enfrenta una alerta crítica. La calificadora Fitch ha advertido sobre los riesgos constantes de contagio por lavado de dinero y la posibilidad de sanciones continuas, un panorama que podría erosionar la confianza y presionar los flujos de capital transfronterizos. Este señalamiento surge tras la designación de tres instituciones por el Departamento del Tesoro de Estados Unidos.
La alerta del tesoro de estados unidos y sus implicaciones
Fitch expuso en un reporte que la designación por parte del Departamento del Tesoro de Estados Unidos de tres instituciones financieras por sospechas de lavado de dinero, vinculadas a cárteles, representa un significativo evento de estrés. Este hecho afecta tanto a entidades bancarias como no bancarias de México, debido al potencial de sanciones continuas y los inherentes riesgos de contagio.
Aunque la participación y presencia de mercado relativamente reducidas de las instituciones afectadas, sumadas a una pronta respuesta regulatoria, han limitado la amenaza de una disrupción más amplia, los posibles riesgos de lavado de dinero se mantienen como un tema de vigilancia continua para el sistema financiero en general.
Reacción regulatoria y degradación de calificaciones
La Red de Control de Delitos Financieros (FinCEN) del Tesoro de Estados Unidos notificó a Intercam Banco, CIBanco y Vector Casa de Bolsa por las sospechas de lavado de dinero. Tras esta notificación, Fitch rebajó la calificación de estas entidades —calificadas por Fitch únicamente en escala nacional— en varias categorías. Esta acción refleja una mayor vulnerabilidad y el posible efecto sobre la liquidez y los ingresos, lo que, en última instancia, podría amenazar su capacidad para cumplir con sus obligaciones financieras. Sin embargo, las tres instituciones financieras han negado cualquier irregularidad, indicó Fitch.
Consecuencias operativas y de mercado
Los riesgos relacionados con el presunto lavado de dinero y la aplicación de la ley pueden socavar rápidamente la viabilidad y continuidad de una institución financiera, perjudicando su perfil comercial, sus ingresos y la confianza de consumidores, inversionistas y contrapartes. Las actividades comerciales de las instituciones afectadas podrían verse impactadas por la congelación de activos, la reversión de transacciones y la incertidumbre legal.
Intercam, CI Banco y Vector siguen siendo empresas en funcionamiento y no están sujetas a liquidación automática. No obstante, a partir del 21 de julio de 2025, las instituciones financieras estadounidenses tienen prohibido transferir fondos a estas entidades o recibirlos de ellas.
La Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV) asumió temporalmente el control de las tres entidades señaladas, tras experimentar problemas operativos y de liquidez. Fitch informó que contrapartes clave, como grandes bancos estadounidenses, bancos locales y otros participantes del mercado, han comenzado a cortar vínculos con estas entidades y a retirar fondos, lo que presiona su liquidez. Además, importantes fideicomisos de inversión inmobiliaria (REIT) mexicanos buscan reemplazar a CIBanco como fiduciario.
La Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) anunció que los negocios fiduciarios de CIBanco e Intercam Banco se transferirán temporalmente a unidades locales de banca de desarrollo para mantenerlos operativos.
Vulnerabilidad de modelos de negocio concentrados
Ambos bancos representaban aproximadamente 1.5 por ciento de los activos totales y menos de 1 por ciento de los préstamos y depósitos del sistema bancario mexicano a abril de 2025. Fitch aseguró que esta pequeña participación de mercado en crédito y depósitos, sus modelos de negocio concentrados y su amplio capital y liquidez limitan la amenaza de una disrupción más amplia. Sin embargo, los bancos con modelos de negocio concentrados o mayoristas enfrentan un mayor riesgo a la baja.
CI Banco e Intercam tienen modelos de negocio fuertemente concentrados en el comercio mayorista de divisas, servicios de derivados y pagos internacionales. Los ingresos por operaciones de divisas representan más de la mitad de los ingresos operativos de los bancos afectados, mientras que los préstamos tradicionales son secundarios. Intercam Banco y CI Banco se ubican entre los 10 principales actores del mercado cambiario de México en conjunto, con 18 por ciento del volumen de divisas negociado por el sector privado no financiero entre 2021 y 2024. Fitch declaró que otros bancos podrían absorber sus actividades de corretaje de divisas, ya que todos tienen permitido operar en este segmento, aunque el apetito por el riesgo varía.
El caso de vector casa de bolsa
Vector Casa de Bolsa tenía una participación de mercado de menos de 1 por ciento de las cuentas de inversión y casi 2 por ciento de las transacciones de custodia a diciembre de 2024. Si bien su modelo de negocio está relativamente diversificado, la situación actual puede afectar negativamente a varias líneas de negocio debido al riesgo reputacional que podría llevar a que los clientes se vayan a la competencia.
La persistencia de riesgos de lavado de dinero en el sistema financiero mexicano, evidenciada por las recientes sanciones y rebajas de calificación, subraya una vulnerabilidad latente que va más allá de las instituciones directamente señaladas. ¿Cómo se fortalecerán los mecanismos de supervisión y cumplimiento para salvaguardar la reputación y la confianza en la banca nacional ante un «círculo rojo» de actores cada vez más vigilante?
