Por Leslie Gordillo/NOTICARIBE PENINSULAR
CANCÚN.- La inflación y la crisis que dejó la pandemia, aún no superada por el sector restaurantero, ha obligado a que más de la mitad de los negocios tenga que elevar los precios en sus menús, pese a que para muchos esto signifique una reducción en sus ventas.
De acuerdo con Julio Villarreal, presidente de la Cámara Nacional de la Industria de Restaurantes y Alimentos Condimentados (CANIRAC) Cancún, este año podría cerrar con una inflación de 2 dígitos, por lo que no pudieron aguantar hasta el inicio del próximo año.
“Yo calculo que más de un 50% de los restaurantes ya se vieron forzados a subir el precio de sus menús, desgraciadamente no pudieron soportar hasta diciembre, era la idea llegar con los mismos precios, desafortunadamente los incrementos que hemos tenido en la carne de res, pollo, huevo, es muy por encima del 8.7 por ciento que anunciaron de la inflación”, lamentó.
La realidad, agregó, es que sí se han visto muy afectados y no elevan sus precios para ganar más dinero, lo que han hecho es poder mantener a la plantilla laboral, sus obligaciones fiscales, laborales y si no hacen esto, significa un detrimento para el negocio y sus trabajadores.
“No sólo el restaurantero gana, son familias enteras que dependen de este gremio. Se ha incrementado un promedio de 8 a 10 por ciento. También entendemos que la economía en el país no está nada bien y que las personas están mermadas en su economía”, afirmó.
