El 13 de noviembre de 2025, la estrategia binacional contra el crimen organizado dio un golpe de alto impacto. Estados Unidos y México designaron formalmente al Grupo Hysa por operar una extensa red de lavado de dinero del Cártel de Sinaloa. La familia de origen albanés y sus 27 entidades quedaron aisladas financieramente, revelando un complejo esquema de desvío de más de mil millones de pesos.
El golpe binacional contra el Grupo de Crimen Organizado Hysa
En una acción coordinada y de alto impacto, el Departamento del Tesoro de Estados Unidos designó a la familia Hysa y su red empresarial como un Grupo de Crimen Organizado Transnacional (TCO, por sus siglas en inglés). Esta medida representa una escalada significativa para combatir las finanzas ilícitas que sostienen a las organizaciones de narcotráfico.
La acusación central es que el Grupo de Crimen Organizado Hysa (HOCG) utilizó su control sobre una red de negocios en México, que incluye prominentemente casinos y restaurantes, para lavar las ganancias del narcotráfico. De manera crítica, el Departamento del Tesoro afirmó que el HOCG opera «con el consentimiento del Cártel de Sinaloa».
La acción se ejecutó a través de dos agencias clave del gobierno estadounidense:
- Oficina de Control de Activos Extranjeros (OFAC): Sancionó a un total de 27 individuos y entidades, incluyendo a los miembros centrales de la familia Hysa, sus facilitadores y la red corporativa que controlan.
- Red de Control de Delitos Financieros (FinCEN): Propuso una medida especial bajo la Sección 311 de la Ley PATRIOTA. Designó a 10 casinos específicos en México, operados por el grupo, como una «preocupación de lavado de dinero de primer orden». Esta acción prohíbe a las instituciones financieras de Estados Unidos mantener o procesar transacciones para estos establecimientos.
El Subsecretario del Tesoro para Terrorismo e Inteligencia Financiera, John K. Hurley, destacó la «sólida colaboración» con el gobierno mexicano en este esfuerzo binacional.
Anatomía de la red Hysa: El liderazgo familiar y sus facilitadores
La estructura del HOCG fue identificada como una empresa criminal familiar de origen albanés que se extiende desde su base en México hasta Canadá y varios países de Europa. Los individuos fueron sancionados por la OFAC de conformidad con la Orden Ejecutiva (E.O.) 13581.
Líderes y operadores familiares
El núcleo de liderazgo está compuesto por cinco miembros de la familia Hysa:
- Luftar Hysa: Identificado como el líder visible y la cara pública de la organización. Opera entre México y Canadá y está acusado de utilizar una entidad con sede en Europa para lavar fondos ilícitos.
- Arben Hysa: Operador clave en la estructura corporativa y propietario de Entretenimiento Palmero S.A. de C.V., una entidad descrita como «central» en el esquema. También se le acusa de utilizar entidades europeas para el blanqueo mediante casinos y restaurantes de lujo.
- Ramiz Hysa: Involucrado directamente en la utilización de casinos y restaurantes de lujo para el lavado de dinero, junto con Arben Hysa.
- Fatos Hysa: Acusado de participar en el tráfico de grandes cantidades de efectivo (bulk cash) hacia Estados Unidos.
- Fabjon Hysa: Implicado, junto con Fatos, en el uso de entidades europeas para el blanqueo de capitales provenientes del narcotráfico.
Se detalló una operación de blanqueo transfronterizo en la que Luftar, Fatos, Arben y Fabjon Hysa trabajaron con una persona estadounidense no identificada. Este esquema movía efectivo a granel desde México a Estados Unidos, usando la empresa de dicho ciudadano para blanquear los fondos e introducirlos en el sistema financiero.
Los facilitadores de cuello blanco
La OFAC también sancionó a la infraestructura de apoyo profesional que proporcionaba legitimidad a la operación, conocida como «facilitadores clave»:
- Eselda Baku (anteriormente Eselda Hysa): Ciudadana albanesa con residencia en México. Hija de Ramiz Hysa, es miembro del Consejo de Directores de la empresa central, Entretenimiento Palmero S.A. de C.V.
- Gilberto López López: Ciudadano mexicano identificado como el «notario de confianza» de la familia Hysa. Su rol fue la constitución de Entretenimiento Palmero S.A. de C.V., lo que apunta directamente a los profesionales que permiten la creación de empresas de fachada.
El imperio empresarial: Diversificación y la arquitectura del lavado
La red corporativa sancionada por la OFAC demostró una sofisticada estrategia de diversificación que iba mucho más allá del sector del juego, utilizando múltiples jurisdicciones como México, Canadá y Polonia.
Estrategia de diversificación sectorial
Para co-minglar fondos y justificar grandes movimientos de capital, el HOCG se diversificó en sectores aparentemente legítimos.
- Juegos y entretenimiento: Núcleo de la operación de «colocación» de efectivo. Incluye a Entretenimiento Palmero, S.A. de C.V. (central), Rosetta Gaming, S.A. de C.V., y LH Pro-Gaming, S.A. de C.V., entre otras seis entidades.
- Alimentos y restaurantes: Designadas por su uso en el lavado. Entre las empresas sancionadas se encuentran Procesadora de Alimentos, S.A. de C.V. (o Procesadora de Alimentos Hs S.A. de C.V.), El Arte de Cocinas y Beber, S.A. de C.V., y Cucina del Porto, S.A. de C.V.
- Energético: H Hidrocarburos, S.A. de C.V.
- Logístico y comercial: Hysa Forwarders, S.A. de C.V.
- Financiero y holdings: Operadora de Empresas LH, S.A. de C.V. y Grupo Internacional Canhysamex, S.A. de C.V., entre otras.
La inclusión de empresas en hidrocarburos, alimentos y logística es un indicador de un posible esquema de Lavado de Dinero Basado en el Comercio (TBML). Mientras los casinos sirven para la «colocación» de efectivo del cártel, otras entidades como H Hidrocarburos o Procesadora de Alimentos son cruciales para las fases de «estratificación» e «integración», emitiendo facturas infladas o ficticias a sus entidades internacionales.
Entidades internacionales y triangulación
La red se extiende internacionalmente, coincidiendo con la residencia de Luftar Hysa entre México y Canadá:
- Canadá: Hysa Holdings Inc y Rosetta Gaming Inc.
- Polonia: Rosetta Gaming SP ZOO.
La fachada del juego y su ubicación estratégica
El componente más visible fue la red de 10 casinos físicos en México, designados por FinCEN. Estas ubicaciones se alinearon directamente con los principales corredores de tráfico y zonas de control del Cártel de Sinaloa.
Las ubicaciones estratégicas identificadas son:
- Corazón del Cártel (Sinaloa): Establecimientos en Culiacán, Guamúchil, Los Mochis y Mazatlán operan en el epicentro del poder del Cártel de Sinaloa, ideales para la «colocación» inicial de ganancias. El Casino Mirage de Culiacán y varios Casino Midas figuran en la lista.
- Corredores de la Frontera (Sonora y Baja California): Puntos de agregación para recolectar el efectivo que se mueve hacia el norte. Incluyen ciudades clave como San Luis Río Colorado (Casino Emine), Agua Prieta, Nogales (Casino Palermo), Rosarito y Ensenada (Casino Skampa).
- Diversificación (Tabasco): La presencia del Casino Skampa en Villahermosa sugiere un esfuerzo por diversificar las operaciones hacia los puertos del Golfo de México.
Anatomía de un esquema de lavado de dinero: El modus operandi detallado
Las autoridades mexicanas, incluyendo la Procuraduría Fiscal de la Federación y la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF), revelaron el complejo esquema utilizado para lavar el dinero del cártel, el cual se ejecutaba en cuatro fases distintas:
Fase 1: Colocación y robo de identidad
La red de casinos reclutaba o robaba las identidades de personas físicas vulnerables (estudiantes, amas de casa, jubilados, desempleados) para obtener sus datos bancarios, cuyos perfiles económicos no coincidían con transacciones grandes.
Fase 2: Simulación de apuestas (Ciclo de lavado)
El dinero en efectivo del cártel se introducía en el sistema entregando a las víctimas tarjetas prepagadas o códigos de premio cargados con estos fondos. Los casinos Hysa simulaban grandes «ganancias» a nombre de estas personas, convirtiendo así el dinero sucio del narcotráfico en «ganancias legítimas de juego».
Fase 3: Extracción y estratificación internacional
El dinero se extraía y se distanciaba de su origen. Las «ganancias» se transferían inmediatamente a cuentas en el extranjero y a paraísos fiscales. La UIF detectó una compleja red de triangulación con flujos de dinero dirigidos a múltiples países, entre ellos:
- Estados Unidos
- Rumania
- Suiza
- Albania
- Malta
- Panamá
- Belice
- Polonia
- Emiratos Árabes Unidos
Fase 4: Integración
Finalmente, el dinero, ahora «limpio», regresaba a México disfrazado de «ganancias legales» o «ingresos de empresas». Esta integración se realizaba probablemente a través de la diversa red de empresas fachada del grupo, como H Hidrocarburos o Procesadora de Alimentos, que podían justificar la recepción de «pagos internacionales» por servicios o bienes.
Las autoridades mexicanas estimaron que el volumen de la operación era masivo, detectando transferencias internacionales irregulares superiores a mil millones de pesos (aproximadamente 54 millones de dólares).
Contexto estratégico: Del desmentido a la acción de 2025
La acción de noviembre de 2025 se produjo después de años de informes de inteligencia que la familia Hysa había negado públicamente.
Los antecedentes de 2022
Informes federales mexicanos de 2022 ya indicaban una presunta alianza entre la familia Hysa e Ismael «El Mayo» Zambada, entonces líder del Cártel de Sinaloa. En diciembre de 2022, los hermanos Luftar, Arben, Ramiz y Fatos Hysa publicaron una carta aclaratoria donde:
- Negaban categóricamente vínculos con cárteles, calificando las imputaciones de «falsas» y «ridículas».
- Afirmaban que autoridades mexicanas (Secretaría de Gobernación y Fiscalía General de la República) los habían exonerado oficialmente de participación en lavado de dinero.
- Alegaban ser víctimas de una «guerra entre casineros».
La acción coordinada de 2025 invalida la defensa de la familia Hysa. La nueva «sólida colaboración» entre el Tesoro de Estados Unidos y la Secretaría de Hacienda bajo la administración de la presidenta Sheinbaum indica un reinicio en la persecución de objetivos de inteligencia financiera.
Aclaración crítica: La acción de la UIF versus OFAC
Las acciones del 13 de noviembre de 2025 generaron una confusión mediática que requiere aclaración:
- Acción de EE. UU. (OFAC/FinCEN): Se centró específicamente en la red del HOCG, sancionando a 27 entidades/individuos Hysa y designando a sus 10 casinos (Emine, Mirage, Midas, Palermo, Skampa).
- Acción de México (UIF): La UIF de México anunció el bloqueo de un total de 13 casinos.
La discrepancia se debe a que la acción de la UIF fue más amplia e incluyó los 10 casinos Hysa, además de otros establecimientos, incluyendo dos casinos vinculados a Grupo Salinas, propiedad del magnate Ricardo Salinas Pliego. La lista del Tesoro de EE. UU. no incluye a los casinos de Grupo Salinas (Ganador Azteca y Operadora Ganador TV Azteca).
Ricardo Salinas Pliego reaccionó públicamente, desestimando la acción de la UIF en su contra como un asunto «político» y «acoso» por parte de la administración Sheinbaum. Irónicamente, la caída de la red Hysa coincidió con una acción doméstica paralela contra un competidor importante, dando eco a la afirmación de los Hysa en 2022 sobre una «guerra de casineros».
El impacto estratégico de la exclusión financiera global
La designación del Grupo Hysa es una de las acciones de inteligencia financiera más significativas contra las redes de lavado del Cártel de Sinaloa en años recientes, con implicaciones inmediatas y estratégicas.
El impacto inmediato en el HOCG incluye el bloqueo total de todos sus bienes e intereses en Estados Unidos, además del aislamiento financiero global. La medida especial de FinCEN contra los 10 casinos, al prohibir transacciones en dólares estadounidenses, equivale a una exclusión efectiva del sistema financiero global. Simultáneamente, la acción coordinada de la UIF desmanteló la infraestructura de lavado del grupo a nivel nacional.
Las implicaciones estratégicas son contundentes:
- Exposición del sector del juego: La acción expone la profunda vulnerabilidad del sector del juego en México como vehículo principal para la «colocación» de efectivo ilícito.
- Cooperación binacional: Demuestra un nivel sin precedentes de intercambio de inteligencia entre el Departamento del Tesoro de Estados Unidos y la Secretaría de Hacienda de México, enfocando la estrategia en atacar el soporte vital del Cártel de Sinaloa.
- Advertencia sobre TBML: La diversificación de la red Hysa en sectores como hidrocarburos, alimentos y logística sirve como una advertencia crítica. Demuestra que el riesgo de lavado de dinero se ha infiltrado en cadenas de suministro industriales legítimas para facilitar el Lavado de Dinero Basado en el Comercio.
¿Podrá este golpe al corazón financiero del crimen organizado modificar de fondo la operatividad de los cárteles o solo forzará una migración hacia métodos de blanqueo aún más sofisticados? El periodismo de investigación seguirá observando las consecuencias de esta histórica designación.











