
Red Bull comenzó el fin de semana del Gran Premio de Austria 2025 con una sólida exhibición en los entrenamientos libres, enfocándose en afinar su coche y proyectar un fuerte ritmo para la carrera del domingo. El equipo superó los desafíos iniciales y mostró una clara mejoría en el rendimiento.
Rendimiento inicial en los libres
El primer entrenamiento libre (FP1) vio a Max Verstappen marcar el segundo mejor tiempo, a solo 65 milésimas de George Russell. Sin embargo, Verstappen no se sintió completamente cómodo con su RB21, reportando problemas de balance por radio y sufriendo un bloqueo de frenos. Su nuevo ingeniero de carrera tomó nota de los comentarios para ajustar el coche. Yuki Tsunoda tuvo una sesión más difícil, adaptándose aún al Red Bull. Terminó 17º tras una salida de pista, lejos de los tiempos de punta.
Ajustes y micro-mejoras aerodinámicas
Red Bull llegó a Spielberg con pequeñas mejoras aerodinámicas en el borde del suelo del RB21, destinadas a optimizar la carga aerodinámica en esa zona. Esta revisión fue descrita como un “micro-ajuste”, buscando ganar décimas. Tras los problemas de balance en FP1, el equipo trabajó intensamente en el coche de Verstappen antes de la FP2, retrasando su salida a pista unos 10 minutos. Estos ajustes buscaron corregir el subviraje o sobreviraje reportado, mejorando el equilibrio del monoplaza para que ambos pilotos ganaran confianza.
Progresión en los libres 2
Los cambios rindieron frutos en el segundo entrenamiento libre (FP2). Max Verstappen mejoró su tiempo, logrando el tercer puesto a 0.318s del líder Lando Norris. Usó dos juegos de neumáticos blandos, mostrando más confianza para buscar la vuelta rápida. Yuki Tsunoda también dio un salto notable, terminando P7 a menos de 4 décimas de Verstappen. Aunque no lideraron la tabla, ambos RB21 quedaron entre los diez primeros en una sesión muy ajustada, con 13 pilotos en menos de un segundo.
Foco en el ritmo de carrera y neumáticos
Más allá de la vuelta rápida, Red Bull se concentró en simular el ritmo de carrera con carga de combustible. Tradicionalmente fuertes en este aspecto, el equipo evaluó la degradación de los neumáticos Pirelli (C3, C4, C5), que en este circuito sufren sobrecalentamiento térmico por las constantes aceleraciones. Verstappen mantuvo tiempos consistentes en tandas largas sin caídas bruscas. Tsunoda reportó sensaciones positivas. Red Bull confía en el balance mejorado del RB21 para gestionar la temperatura de las gomas y proyecta un ritmo sólido para el domingo, buscando sacar ventaja en la gestión de neumáticos. Las simulaciones sugieren que el desgaste es manejable, permitiendo a los pilotos atacar.
El trabajo del viernes en Austria 2025 permitió a Red Bull identificar y corregir problemas iniciales de balance. Con mejoras aerodinámicas y un coche equilibrado en tandas largas, la escudería se posiciona como un contendiente serio para el podio en su circuito de casa, incluso si no dominaron los tiempos iniciales. ¿Podrá este enfoque estratégico en el ritmo de carrera darles la victoria el domingo?