Redacción
COZUMEL.-La propuesta para construir un cuarto muelle de cruceros en Cozumel, impulsada por Muelles del Caribe S.A. de C.V., ha desatado tensiones entre quienes defienden el desarrollo económico y los que alertan sobre un daño irreversible al entorno natural.
El proyecto está previsto construirse frente al arrecife y playa pública “Villa Blanca”, con inversión de alrededor de 58 millones de pesos .
Organizaciones como CIMAC y biólogos independientes advierten que el muelle podría eliminar la única playa pública de esa zona así como dañar el arrecife Villa Blanca, hogar de al menos 40 especies de coral.
Los opositores también destacan que la Manifestación de Impacto Ambiental (MIA) omite al menos 13 especies de coral, cuando en una evaluación independiente se hallaron 20 especies en riesgo dentro del área afectada .
La construcción requiere dragado y cimentación que destruirán hábitats en el arrecife Villablanca, vital por su conectividad ecológica y biodiversidad -incluidos corales cuerno de alce, peces loro y tortugas marinas- justo fuera del Parque Nacional Arrecifes de Cozumel .
Advierten que la isla ya recibe hasta 3 mil 500 visitantes al día, superando con ello la capacidad sostenible del Parque Nacional, provocando estrés y blanqueamiento del coral .
La capacidad actual de los muelles opera sólo al 53 % en 2019, lo que cuestiona la necesidad real de uno nuevo .
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Los representantes de Ongs alertan que los violentos dragados aumentarían la sedimentación, afectando corrientes marinas y reduciendo la calidad del agua .
Entre tanto los representantes de Muelles del Caribe alegan que la isla no está saturada: la ocupación creció un 26 % entre 2015 y 2019, y en temporadas altas ya se rebasa la capacidad instalada .
Apuntan que los cruceros modernos son mas grandes, por ello se requiere infraestructura más amplia para operaciones futuras.
Asimismo señalan que la MIA aprobada por la Semarnat no detectó corales NOM‑059 en la zona, basándose en estudios de campo que describen sustrato arenoso con poca presencia de machones coralinos.
José Luis Cervantes, vocero de Muelles del Caribe, en una rueda de prensa hace un par de días en la isla, dijo que la obra cuenta con sustento legal y técnico, tras un proceso de más de tres años de revisiones ambientales, jurídicas y administrativas.
“Invitamos a la comunidad a mantener la paz y el respeto al Estado de Derecho. La violencia no ayuda a resolver las diferencias”, señaló Cervantes, al referirse a manifestaciones recientes contra el proyecto.
Cuestionada al respecto la presidenta de México, Claudia Sheinbaum, el pasado 7 de mayo habló del tema y dijo que el cuarto muelle no tiene aprobada la Manifestación de Impacto Ambiental.
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Sin embargo los opositores la sacaron de su error al señalar que la presidenta se equivocó de proyecto ya que se refirió a la ampliación de otro muelle en la isla.
También hay voces a favor del proyecto como la de Moisés Méndez Balam, secretario general de la Confederación de Trabajadores de México (CTM) en la isla, quien manifestó su respaldo al proyecto de construcción del Cuarto Muelle de cruceros que impulsa la empresa SSA México, pese a la larga cadena de controversias que arrastra la obra desde su concepción.
Para Méndez Balam, la nueva infraestructura portuaria podría traer beneficios inmediatos al sector laboral, al facilitar la llegada de turistas al centro de la isla y generar empleos en un contexto donde aún se resienten los estragos económicos derivados de la pandemia.
Cabe señalar que en en 2021 se otorgó la ManifestacióndeImpacto Ambiental (MIA) tras lo cual grupos ciudadanos y ONG como CIMAC, Citymar y el Colectivo Isla Cozumel emprendieron protestas, amparos y campañas para hacer conciencia sobre la inconveniencia del proyecto.
Hoy día la comunidad de Cozumel está polarizada: por un lado, defensores del proyecto hacia una economía más robusta y competitiva; por otro, defensores del entorno natural que exigen transparencia, protección del patrimonio marino y un análisis más riguroso del impacto ambiental real.
El proceso legal sigue abierto y el futuro del muelle depende del equilibrio entre desarrollo económico, sustentabilidad ambiental y participación ciudadana.
Para hoy 11 de junio hay versiones de que los opositores al cuarto muelle saldrán a las calles para exigir se cancele el proyecto, pero a la par también se promueve la manifestación de los que están a favor del cuarto muelle como generador de modernidad y empleos para la isla.
