
La planta de General Motors en Silao, Guanajuato, ha detenido su producción por varias semanas, un movimiento inusual para sus modelos más rentables. Esta pausa, confirmada por la compañía, parece ligada a las disrupciones de la guerra comercial del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, y restricciones chinas sobre componentes clave.
Parada inusual en Silao
El complejo de ensamblaje de General Motors en Silao, en el estado de Guanajuato, donde la compañía ensambla las camionetas Chevrolet Silverado y GMC Sierra, estuvo inactivo durante las dos primeras semanas de julio. Además, está programado que pare de nuevo las semanas del 4 y del 11 de agosto, según personas familiarizadas con el asunto. General Motors no confirmó el calendario exacto. “Las semanas de inactividad programadas en GM Silao son parte de un proceso operativo estándar centrado en optimizar la producción en nuestro complejo de fabricación”, dijo General Motors en respuesta a una consulta.
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Contexto de la disrupción
La Silverado y la mecánicamente similar Sierra son, con diferencia, los modelos más vendidos de General Motors en Estados Unidos. Son los principales generadores de beneficios para la empresa. General Motors también fabrica el Silverado y el Sierra en Fort Wayne, Flint y en Ontario, en Canadá. Es habitual que los fabricantes de automóviles detengan el trabajo en las fábricas para realizar tareas de mantenimiento o ajustar las líneas de montaje. Sin embargo, varias semanas de inactividad es inusual para una fábrica que hace los modelos más populares de General Motors. Las camionetas son los mayores generadores de dinero para General Motors, Ford y Stellantis y sus plantas de camionetas a menudo funcionan las veinticuatro horas del día.
El vínculo con la guerra comercial
Te puede interesar:Peso mexicano cae por represalias de China: ¿riesgo de recesión … General Motors vendió 278 mil 599 Silverado en el primer semestre de 2025, 2 por ciento más que en el mismo periodo del año anterior. El fabricante de automóviles vendió 166 mil 409 camionetas Sierra en el mismo periodo, un aumento de 12 por ciento frente al primer semestre de 2024. A pesar del crecimiento en ventas, la guerra comercial del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha interrumpido las cadenas de suministro. También ha afectado el trabajo en las fábricas de las automotrices y los proveedores de piezas en los últimos meses. Algunas empresas automovilísticas han cambiado los planes de producción para mitigar el impacto de los aranceles de Trump sobre los automóviles importados. Las restricciones de represalia de China sobre los imanes y otras piezas que incluyen metales de tierras raras también han alterado las operaciones.
Esta prolongada inactividad en una planta clave subraya las profundas cicatrices que las tensiones comerciales y arancelarias siguen dejando en la industria automotriz global y mexicana.