
La economía mexicana en 2025: una expectativa casi nula de crecimiento
Cuando parecía que la economía mexicana saldría del letargo, una nueva encuesta de Citi revela que el 2025 será otro año de estancamiento. El Producto Interno Bruto apenas crecería 0.10%, una cifra que refleja incertidumbre, presión inflacionaria y escasa confianza en la política económica que acompañará el inicio del nuevo gobierno.
¿Qué dicen los expertos? La economía en modo pausa
Los resultados de la encuesta realizada por Citigroup a 34 analistas financieros y economistas reflejan una visión pesimista: la media del crecimiento esperado para el PIB en 2025 es de apenas 0.10%. Es la segunda quincena consecutiva con esta proyección, lo que marca un cambio respecto a las reducciones constantes de los meses anteriores. Aunque se detuvo la tendencia a la baja, la expectativa sigue siendo mínima.
El dato que inquieta: crece el número de expertos que prevén contracción
Uno de los hallazgos más significativos es que 12 de los 34 estrategas anticipan una contracción económica en el primer año de gobierno de Claudia Sheinbaum. Es una cifra que triplica la registrada apenas en abril, cuando sólo cuatro analistas veían un escenario recesivo. Además, 20 de los expertos prevén un crecimiento menor al 1%, lo que confirma una percepción extendida de debilidad estructural.
Inflación en aumento: otro frente abierto
La inflación también preocupa. Los expertos subieron su estimación para el cierre de 2025 a 3.85%, ligeramente por encima del 3.80% que preveían al comenzar mayo. Esta es la segunda revisión quincenal consecutiva al alza, confirmando presiones persistentes sobre los precios, un factor que limita el margen de maniobra del Banco de México.
Expectativas de tasa de interés: recortes limitados
Con ese panorama, el mercado anticipa que el Banco de México reducirá la tasa de interés a 7.50% para fin de año, desde el 8.50% actual. Se proyecta que el ciclo de recortes iniciado en marzo de 2024 continuará, pero de forma prudente. En concreto, 29 de los 32 analistas encuestados esperan un nuevo recorte de 50 puntos base en la próxima decisión del 26 de junio.
Las instituciones con pronósticos más sombríos
Entre las casas de análisis más cautas se encuentran Oxford Economics, Intercam y Banamex, que prevén crecimiento cero para el 2025. Sus estimaciones colocan un fuerte signo de interrogación sobre la capacidad del país para reactivar el dinamismo económico en el corto plazo.
¿Un respiro en 2026?
Pese al pesimismo para 2025, los analistas ven un posible repunte en 2026, con una media de crecimiento proyectado de 1.5%. Las previsiones van desde un optimista 2% estimado por Banorte, Barclays y HSBC, hasta un modesto 0.2% previsto por BNP Paribas.
Inflación a la baja y tasas estables
Para 2026, la inflación se ubicaría en 3.77%, en una trayectoria descendente. Las tasas de interés podrían cerrar ese año en 7%, contemplando sólo uno o dos recortes menores. Esta estabilidad proyectada permitiría, en teoría, una mejor planeación económica para el segundo año de la administración entrante.
El reto de Sheinbaum: gobernar con el freno económico puesto
La administración de Claudia Sheinbaum arrancará en un escenario complejo: bajo crecimiento, inflación presionada y poco margen para maniobras fiscales expansivas. La lectura que hacen los mercados es clara: se necesita más que continuidad para reactivar la economía.
¿Qué implicaciones tiene esto para el sureste y el Caribe mexicano?
En regiones como el Caribe mexicano, cuya economía depende en gran medida del turismo y la inversión pública, un entorno nacional estancado podría ralentizar proyectos de infraestructura, limitar empleo y frenar consumo interno. La promesa del desarrollo regional necesita respaldo macroeconómico, algo que por ahora parece lejano.
Una economía en la cuerda floja y con el tiempo en contra
Los datos de Citi confirman lo que ya se sentía en el ambiente: el 2025 será un año de transición económica sin impulso claro. El estancamiento proyectado no sólo es estadístico, sino político y social. Las decisiones que tome el nuevo gobierno en los próximos meses serán determinantes para modificar —o confirmar— este escenario.