
El peso se impone en mercados globales mientras el dólar se debilita
En plena calma financiera local por Semana Santa, el peso mexicano sorprendió al cotizar en su mejor nivel desde octubre de 2024, operando en alrededor de 19.70 unidades por dólar.
En medio de tensiones comerciales y recortes de tasas en Europa, la moneda nacional dio muestra de su resistencia en el tablero internacional.
¿Por qué el peso se fortaleció justo antes del Viernes Santo?
El reciente fortalecimiento del peso no fue casualidad ni producto de una mejora estructural en la economía mexicana. En realidad, la moneda encontró una ventana de oportunidad mientras los mercados financieros internacionales reaccionaban con cautela a nuevos episodios de volatilidad global.
La clave: un dólar debilitado y una pausa obligada en la actividad financiera nacional por el feriado de Semana Santa.
Un peso sin descanso, operando 24/7
A diferencia de otras divisas emergentes, el peso mexicano tiene una ventaja competitiva: puede comprarse o venderse las 24 horas del día, los 365 días del año.
Este dinamismo le permitió brillar en una jornada en la que no hubo operaciones locales debido a la cercanía del Viernes Santo. Mientras los mercados mexicanos estaban en pausa, el peso cotizó en los mercados electrónicos internacionales con una apreciación cercana al 1%.
El dólar tambalea frente a monedas emergentes
El índice DXY, que mide el valor del dólar frente a seis monedas de referencia, apenas avanzó 0.04%, situándose en 99.18 unidades. Sin embargo, esta mínima variación no fue suficiente para sostener la posición del dólar ante el peso mexicano, que se benefició directamente de los temores globales por nuevas medidas arancelarias anunciadas por la administración de Trump contra China.
Contexto internacional: guerra comercial y decisiones monetarias
Mercados en tensión por amenazas de EU a China
El conflicto comercial entre Estados Unidos y China volvió a escalar, generando incertidumbre entre inversionistas globales. Las amenazas arancelarias provocaron un ajuste de posiciones, debilitando al dólar y fortaleciendo monedas emergentes como el peso.
En ese escenario, los capitales buscaron refugio temporal en activos de mayor riesgo, incluido el peso mexicano.
Europa baja tasas: séptimo recorte del BCE
A esto se suma el anuncio del séptimo recorte consecutivo de la tasa de referencia del Banco Central Europeo (BCE), que pasó de 2.5% a 2.25%.
Este ajuste, el más bajo desde diciembre de 2022, se da en un contexto de desaceleración económica e intentos por contener una inflación aún latente. La medida impactó en los flujos internacionales de capital y reconfiguró la demanda de divisas.
Mercados bursátiles: señales mixtas en EU
Cautela y pérdidas en Wall Street
Los mercados estadounidenses cerraron con resultados mixtos. El S&P 500 avanzó apenas 0.13%, mientras el Nasdaq retrocedió 0.13% y el Dow Jones cayó 1.33%, afectado por la fuerte caída de UnitedHealth, cuyas acciones se desplomaron más de 22% tras reportar resultados negativos. Esta mezcla de cautela e inestabilidad bursátil también favoreció temporalmente al peso como alternativa de inversión.
Precios del petróleo: un factor adicional a considerar
El precio del crudo, otro indicador sensible al riesgo geopolítico, también mostró movimientos relevantes. El Brent para entrega en junio subió 3.2% hasta los 67.96 dólares por barril, mientras el West Texas Intermediate aumentó 3.54%, situándose en 64.68 dólares.
Las tensiones entre Estados Unidos e Irán y las nuevas sanciones impuestas al petróleo iraní alimentaron la volatilidad energética.
¿Qué implica este repunte del peso para México?
Aunque se trate de un fortalecimiento coyuntural, el comportamiento reciente del peso revela varios puntos clave:
Ventaja estructural del peso como divisa emergente
La alta liquidez del peso lo convierte en una herramienta útil para inversionistas que buscan moverse rápidamente ante noticias geopolíticas. Este rasgo ha sido explotado por operadores en momentos de incertidumbre como el actual.
Volatilidad disfrazada de fortaleza
El fortalecimiento del peso no debe confundirse con una mejora estructural. La economía mexicana enfrenta sus propios desafíos internos, y la apreciación actual responde más a debilidades externas (como el dólar) que a fortalezas propias.
Impacto en comercio e inflación
Un peso más fuerte puede ayudar a contener la inflación importada, especialmente en productos que se cotizan en dólares. No obstante, también puede afectar las exportaciones mexicanas, al encarecerlas para mercados extranjeros.
Lo que viene: ¿sostendrá el peso su impulso?
El próximo lunes, cuando se reanuden las operaciones financieras en México, el peso enfrentará un nuevo escenario: los mercados locales reaccionarán a lo ocurrido durante la Semana Santa en el frente internacional. La pregunta es si la moneda podrá sostener este nivel de 19.70 por dólar o si regresará al rango de 20 unidades.
Claves a monitorear:
- Declaraciones de la Reserva Federal sobre política monetaria.
- Evolución del conflicto comercial entre EU y China.
- Comportamiento del dólar y tasas de interés globales.
- Datos macroeconómicos locales como inflación y crecimiento.
Un respiro momentáneo para el peso mexicano
El peso mexicano logró una victoria simbólica en los mercados internacionales, aprovechando la debilidad del dólar y el ruido geopolítico. No obstante, esta apreciación es frágil y está lejos de garantizar una tendencia sostenida.
En un entorno global donde las decisiones monetarias, los conflictos comerciales y los vaivenes bursátiles mandan, la moneda nacional seguirá sujeta a presiones externas. Lo que hoy es alivio, mañana puede convertirse en ajuste.