
Peso firme ante dólar y arancel: ¿resistencia o espejismo económico?
En un giro que desafía las expectativas, el peso mexicano se aprecia frente al dólar mientras se avecina un duro golpe comercial desde Estados Unidos: un nuevo arancel al jitomate. A pesar de la presión internacional y la volatilidad financiera, la moneda nacional mantiene una sorprendente estabilidad.
Un peso que resiste en medio de la tormenta
Contexto económico con sabor a jitomate
El peso mexicano arrancó la jornada con una apreciación de 0.71%, cotizando en 19.93 unidades por dólar, una cifra significativa que lo ubica por debajo del simbólico umbral de los 20 pesos. Esto ocurre en un entorno global donde el dólar se fortalece, avanzando 0.24% según su índice frente a una canasta de seis divisas internacionales.
Pero este aparente buen momento monetario se da justo cuando se anuncia una medida que amenaza con golpear el comercio bilateral más sensible entre México y Estados Unidos: el jitomate.
¿Por qué importa tanto el jitomate?
Desde 2019, el jitomate mexicano ha entrado libre de aranceles al mercado estadounidense, bajo un acuerdo que ha sido clave para los productores nacionales. Pero la administración de Donald Trump ha decidido romper con ese pacto, imponiendo un arancel de 20.9% a partir del 14 de julio de 2025.
Esto no es un tema menor. El 84% del jitomate producido en México se exporta a Estados Unidos, y representa casi la mitad del consumo del país vecino. El impacto económico será inmediato para productores, exportadores y trabajadores del sector agroalimentario en estados clave como Sinaloa, Michoacán y también en zonas del sur como Yucatán y Quintana Roo, donde crecen los esfuerzos por diversificar cultivos.
¿Por qué se fortalece el peso en plena tensión comercial?
Poca liquidez, gran resistencia
Una de las claves detrás del comportamiento del peso es la baja liquidez del mercado en esta jornada, lo que reduce la presión sobre la moneda nacional. Pero también influyen otros factores externos que han matizado el panorama.
La credibilidad del mercado frente a las decisiones erráticas de Trump en política comercial, así como la recuperación del apetito por bonos del Tesoro de Estados Unidos, han contribuido a una reconfiguración temporal en el flujo de capitales, favoreciendo monedas emergentes como la mexicana.
El contexto global que juega a favor del peso
Mercados en recuperación
Las principales bolsas del mundo han comenzado a estabilizarse. Wall Street muestra signos de recuperación, con el índice S&P 500 subiendo 0.56% y el Nasdaq 0.64%, lo que se traduce en un entorno financiero menos adverso.
En México, la Bolsa Mexicana de Valores también avanza 0.28%, reflejando cierto optimismo por parte de los inversionistas locales, que ven en la estabilidad del peso un síntoma de confianza.
Bonos y petróleo: señales mixtas
Los bonos del Tesoro estadounidense están mostrando señales de atracción renovada. La rentabilidad exigida al bono a 10 años baja a 4.374%, lo que implica una revalorización del instrumento.
En el frente energético, el precio del petróleo tipo Brent sube a 65.15 dólares por barril, mientras el West Texas se ubica en 61.80 dólares. Este rebote en los precios es interpretado como una respuesta a posibles concesiones por parte de la Casa Blanca en su política arancelaria, lo que daría oxígeno a las previsiones de crecimiento.
Otros refugios de valor también se mueven
Oro y bitcoin: dos extremos de la confianza
El oro, clásico activo refugio en tiempos de incertidumbre, se mantiene por encima de los 3 mil 300 dólares la onza y sube 0.32% durante la mañana. Mientras tanto, el bitcoin consolida su avance sobre los 85 mil dólares, mostrando que los inversores siguen diversificando sus apuestas entre activos tradicionales y criptomonedas de alto riesgo.
¿Una victoria simbólica del peso… o el principio de un ajuste?
El riesgo detrás de la apreciación
Aunque el tipo de cambio actual favorece a la moneda mexicana, los analistas advierten que este nivel puede ser efímero si se intensifica la tensión comercial con Estados Unidos o si aumentan los temores por una ralentización económica global.
El arancel al jitomate podría ser solo el primer paso de una estrategia más amplia de Trump, en su nueva campaña electoral, para presionar a México en sectores clave sin afectar directamente a los grandes intereses empresariales de su país.
¿Qué sigue para el peso mexicano?
Lo que el sur del país debe observar
Para regiones como el Caribe Mexicano, donde el impacto del jitomate no es directo pero sí relevante por su papel en la cadena agroalimentaria y el abasto a zonas turísticas, el comportamiento del peso puede traducirse en variaciones en precios, importaciones y percepción de estabilidad.
Además, la fortaleza del peso puede ser un buen aliciente para el turismo receptivo, que podría ver abaratado el costo de servicios en dólares.
Entre la estabilidad monetaria y la fragilidad comercial
La apreciación del peso frente al dólar en 19.93 unidades es una señal de fortaleza, pero no necesariamente de certidumbre. El anuncio del nuevo arancel al jitomate marca un punto de inflexión en las relaciones comerciales México-EE.UU., y pone a prueba la capacidad del país para sostener su competitividad ante medidas unilaterales.