
El vaivén del dólar sacude al peso mexicano y alerta a los mercados
Era una mañana prometedora: el peso rompía la barrera de los 20 por dólar y la Bolsa Mexicana mostraba señales de recuperación. Pero bastaron unas horas para que el espejismo se desvaneciera.
La sombra del dólar, fortalecido por el apetito global por bonos estadounidenses, terminó arrastrando al mercado mexicano, que cerró la jornada entre dudas, caídas y un sabor amargo.
Un peso mexicano vulnerable frente al nuevo ciclo del dólar
La moneda se aprecia, pero no resiste
La jornada arrancó con una racha de optimismo. La moneda mexicana operaba por debajo de los 20 pesos por dólar, una señal positiva en medio de tensiones comerciales entre México y Estados Unidos. Sin embargo, ese impulso se desvaneció rápidamente.
Según datos del Banco de México, el tipo de cambio se movió entre un mínimo de 19.9620 y un máximo de 20.1370 pesos por dólar en el mercado spot. La moneda terminó cotizando en 20.1235, incapaz de mantener sus ganancias iniciales.
Este comportamiento refleja la alta volatilidad que enfrenta el peso, muy sensible a los movimientos del dólar y a las percepciones de riesgo global. En apenas unas horas, el mercado pasó de la confianza a la cautela.
¿Por qué se fortaleció el dólar?
El motor detrás del fortalecimiento del dólar fue el renovado apetito por la deuda estadounidense. Tras una semana de ventas, los inversionistas regresaron al mercado de bonos, especialmente al de 10 años, cuya tasa bajó de 4.40 % a 4.341 %. Esta caída en la rentabilidad refleja un mayor interés por activos seguros, lo que presiona a las monedas emergentes como el peso mexicano.
El índice del dólar —que mide su fortaleza frente a una canasta de monedas— repuntó 0.52 %, dejando claro que el billete verde sigue siendo refugio ante la incertidumbre global.
Wall Street en compás de espera: efecto dominó en México
Los mercados internacionales no logran consolidarse
En Wall Street, el ambiente fue de expectativa más que de acción. El Nasdaq apenas retrocedió 0.05 %, mientras que el Dow Jones y el S&P 500 cayeron 0.39 % y 0.17 %, respectivamente. Los sectores tecnológico y automotriz ofrecieron un desempeño mixto: Nvidia subió 1.35 %, pero Ford cayó 2.63 %, y General Motors bajó 1.33 %.
Esta dinámica revela la falta de convicción de los inversionistas, que aguardan definiciones sobre la política comercial de Estados Unidos, especialmente respecto a los aranceles a productos tecnológicos chinos.
Impacto directo en el mercado mexicano
La incertidumbre también se contagió a la Bolsa Mexicana de Valores (BMV). A pesar de un repunte de 0.48 % en su Índice de Precios y Cotizaciones (IPC), el avance estuvo lejos del optimismo matutino.
Las ganancias provinieron principalmente de grandes emisoras como América Móvil (2.47 %), Banorte (2.23 %), Grupo México (1.52 %), Peñoles (1.15 %) y Walmart (1.45 %). Sin embargo, la percepción de riesgo aumentó conforme se diluía el impulso inicial.
Precios globales: petróleo y oro en rutas opuestas
Petróleo cede terreno por previsiones de demanda
El mercado energético tampoco escapó a la presión. El barril de Brent para entrega en junio cayó 0.32 %, hasta los 64.67 dólares, mientras que el West Texas Intermediate (WTI) retrocedió 0.33 %, ubicándose en 61.33 dólares por barril.
El descenso responde a una revisión a la baja en las previsiones de demanda mundial, sumada a la persistente tensión comercial entre China y Estados Unidos. La posibilidad de una menor actividad económica global pone un freno a la recuperación del crudo.
Oro brilla con fuerza en tiempos inciertos
Contrario al petróleo, el oro continúa su escalada. El activo refugio por excelencia avanzó 0.64 %, alcanzando los 3,247 dólares por onza, cerca de sus máximos históricos. Su atractivo aumenta ante el escepticismo de los mercados y el vaivén de las tasas de interés.
El rally del oro está siendo respaldado por firmas de análisis que ven en el metal una defensa frente a la volatilidad financiera y la inflación persistente en las principales economías.
Bitcoin se frena en los 85 mil dólares
Otro indicador del pulso financiero global es el comportamiento de las criptomonedas. El bitcoin, luego de acercarse a los 85 mil dólares, se estabilizó en los 83 mil 800, abandonando momentáneamente su rally alcista.
A pesar de su perfil de riesgo elevado, el bitcoin sigue atrayendo capital como alternativa a los activos tradicionales. No obstante, su alto nivel de especulación lo convierte en un termómetro más de la volatilidad que domina los mercados globales.
Lo que viene: señales mixtas y expectativa creciente
La fotografía del día muestra a un peso mexicano frágil, atrapado en una dinámica internacional dominada por la incertidumbre. El repunte del dólar, el vaivén en Wall Street y la caída del petróleo contrastan con la fuerza del oro y la cautela del bitcoin.
México, con una economía profundamente integrada al entorno estadounidense, no puede sustraerse a estos movimientos. La tensión arancelaria, el comportamiento de los bonos del Tesoro y las decisiones políticas de la Casa Blanca serán claves para entender la próxima fase.
Una pausa que puede anunciar nuevas turbulencias
La jornada financiera de este martes no solo evidenció la fragilidad del peso mexicano, sino también la falta de dirección clara en los mercados globales. El peso frenó su apreciación, la bolsa osciló sin rumbo y el petróleo cayó ante perspectivas desalentadoras.
Si bien el oro mantiene su brillo como refugio, y algunas emisoras mexicanas registran ganancias, la sensación general es de cautela. Con la mirada puesta en Washington y Pekín, y el oído atento a la Reserva Federal, México deberá navegar con prudencia en las próximas semanas.