
Alejandro Peza/CARIBE PENINSULAR
CHETUMAL.- La Secretaría de Seguridad Ciudadana de Quintana Roo anunció que continuará con sus operativos de control vehicular pese a los señalamientos y reclamos que han hecho conductores de automóviles por supuestos abusos de autoridad de los agentes de Tránsito.
Desde inicios de año, la Dirección de Tránsito a cargo de Efraín García estableció diversos puntos de control vehicular en la ciudad de Chetumal con el objetivo de “garantizar” la seguridad de los ciudadanos.
Además se han intensificado los operativos para retirar el polarizado irregular de los vehículos y asegurar que todos porten sus placas de manera visible y en el lugar reglamentario, pero estas medidas son consideradas por los automovilistas como recaudatorias.
El artículo 97 del reglamento de Tránsito del Estado señala que todos los vehículos que porten polarizado deben contar con un permiso otorgado por la autoridad.
Artículo 97.- Para poder transitar vehículos con cristales polarizados o cubiertos con pintura o materiales de cualquier clase se requerirá autorización especial de la Dirección de Tránsito cubriendo los derechos correspondientes, quedando prohibido el uso de material con acabado de espejo. Se exceptúa esta disposición a los vehículos del servicio público.
El artículo señala que TODOS los vehículos deberán de contar con sus permisos, incluso los autos oficiales pero el reglamento es burlado por patrullas y camionetas de funcionarios públicos de Quintana Roo quienes si pueden usar el polarizado más oscuro pese a que su uso está prohibido.
El reglamento de Tránsito de Quintana Roo tuvo su última actualización en el año de 1998 pero es vigente y aplicable.
De acuerdo con el reglamento de tránsito estatal, cualquier vehículo que porte polarizado no autorizado será motivo de inspección. “No se trata de recaudar multas, sino de reducir la incidencia delictiva dio a conocer Julio César Gómez, secretario de Seguridad Ciudadana
“Los polarizados impiden identificar quién viaja dentro de un vehículo, y eso se ha convertido en una herramienta para los delincuentes”.
Durante los operativos, los conductores son invitados a retirar el polarizado en el lugar; si se niegan, se aplica una infracción de 826 pesos. Sin embargo, si reinciden o son sorprendidos nuevamente con el mismo vehículo polarizado, se impondrá una nueva multa.
Además, en los casos en que exista una justificación médica que permita el uso de un tipo de polarizado, los conductores deberán tramitar un permiso especial ante la Dirección de Tránsito. Dichos permisos deben cumplir con los niveles de opacidad permitidos por la ley.
En cuanto a los vehículos sin placas, las autoridades destacaron que algunos conductores optan por llevar las placas en la cajuela o dentro del parabrisas, lo que también está prohibido.
Según el reglamento, las placas deben colocarse de manera visible en los espacios diseñados para ello o, en caso de que el vehículo no cuente con un soporte, se deben fijar a la altura de la defensa. Los conductores que no cumplan con esta disposición recibirán una invitación a corregir la falta, y de no hacerlo, se les aplicará la infracción correspondiente.