Por Leslie Gordillo
CANCÚN.- El líder sindical de la Confederación Revolucionaria de Obreros y Campesinos (CROC) en el ayuntamiento Benito Juárez, Mario Machuca Sánchez, confirmó que trabajadores sindicalizados de Aguakán decidieron manifestarse esta mañana para exigir la reinstalación de algunos trabajadores y el respeto a sus derechos laborales.
Durante las primeras horas de la manifestación se suspendieron algunos servicios como el llenado de pipas, pero luego del diálogo se logró un acuerdo.
“Están en su derecho de manifestarse, pero hablamos con ellos para que dejen pasar las pipas y no se afecte a la población. Muchas comunidades necesitan el agua, y no podemos permitir que el conflicto laboral afecte servicios básicos”, explicó.
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Tras un proceso de titularidad, destacó, el contrato colectivo quedó en manos de la CROC, según decisión mayoritaria de los propios empleados, sin embargo, denunciaron que la empresa continúa impidiendo la operación normal del sindicato, negando el ingreso y funciones de los delegados sindicales, lo que ha generado un ambiente de inquietud, molestia e incertidumbre entre la plantilla laboral.
En promedio son 400 trabajadores que tienen molestia porque tiene ya tiempo que se hizo dicha titularidad y ahora sus exigencias principales son las siguientes:
1. La reinstalación inmediata de los trabajadores despedidos injustificadamente, así como el pago de los salarios caídos.
2. La destitución de la Lic. Gabriela Hernández y del Ing. Tomás García, a quienes acusan de violar lo establecido en el Artículo 133, fracciones IV y V de la Ley Federal del Trabajo.
3. Respeto a la libertad sindical y a la titularidad del contrato colectivo que sostiene el sindicato de la CROC.
Puntualizaron que los despidos y acciones por parte de la empresa concesionaria de agua potable representan una violación a sus derechos laborales y sindicales, por lo que optaron por manifestarse públicamente hasta recibir una respuesta formal por parte de Aguakan.
Los inconformes son trabajadores sindicalizados de Aguakan, pertenecientes a la Confederación Revolucionaria de Obreros y Campesinos (CROC), quienes con carteles en mano expusieron sus inconformidades.
