Una directriz secreta, emanada desde la Casa Blanca, ha redimensionado la lucha contra el narcotráfico. El presidente Donald Trump autorizó al Pentágono a emplear fuerza militar directa contra cárteles en América Latina, organizaciones designadas ahora como terroristas, desatando un debate sobre las implicaciones geopolíticas de esta orden ejecutiva.
La Directriz Secreta y su Alcance Geográfico
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, firmó en secreto una orden ejecutiva que autoriza al Pentágono a emplear fuerza militar directa contra ciertos cárteles del narcotráfico en América Latina. Estas agrupaciones son consideradas por su administración como organizaciones terroristas extranjeras, de acuerdo con una nota de The New York Times.
Fuentes cercanas a la Casa Blanca, citadas por The New York Times y que hablaron bajo condición de anonimato, revelaron que la decisión de Trump permitiría a las fuerzas armadas estadounidenses ejecutar misiones fuera del país, tanto marítimas como terrestres, contra diversas organizaciones. Entre ellas se incluyen el Tren de Aragua y la Mara Salvatrucha (MS-13), además de cárteles mexicanos como el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG), Cártel de Sinaloa, el Cártel del Golfo, La Nueva Familia Michoacana, el Cártel del Noroeste (CDC, una escisión de los Zetas), y Carteles Unidos, un conjunto de células que opera en el sur de México. Estas agrupaciones fueron oficialmente designadas como terroristas en febrero pasado por el Departamento de Estado.
Tensión Bilateral: La Postura de México
The New York Times afirmó que en abril pasado, Trump propuso a la presidenta de México, Claudia Sheinbaum, que permitiera al ejército estadounidense luchar contra los cárteles de la droga en territorio de su país. Sin embargo, ella rechazó la idea.
La Base Legal y las Cuestiones Controversiales
De acuerdo con el aviso del Departamento de Estado hecho en febrero, estos grupos representan una amenaza para la seguridad nacional, la política exterior y los intereses económicos de la nación norteamericana. La designación obedece a lo establecido en la sección 219 de la Ley de Inmigración y Nacionalidad (INA). La medida fue tomada tras una revisión de los registros administrativos y en consulta con el Fiscal General y el Secretario del Tesoro, señaló la dependencia estadounidense.
Preocupación por el Derecho Internacional
La orden ejecutiva de Trump fue emitida sin anuncio público y, según reportes del NYT, funcionarios del Pentágono ya trabajan en el diseño de posibles escenarios operativos. La medida ha generado preocupación entre expertos legales, quienes advierten que atacar objetivos fuera de un conflicto armado aprobado por el Congreso podría violar leyes internacionales y derivar en acusaciones de “asesinatos extrajudiciales”.
Precedentes y Refuerzo de la Estrategia
El 25 de julio, el gobierno de Estados Unidos, a través de la Oficina de Control de Activos Extranjeros (OFAC), designó al Cártel de los Soles de Venezuela como organización terrorista extranjera. La OFAC citó su estructura criminal, vínculos con grupos armados irregulares y su participación en actividades que amenazan la seguridad internacional, el orden público y la estabilidad regional. Además, ligó al presidente venezolano, Nicolás Maduro, con el Cártel de los Soles. Este jueves, la recompensa que dé con la captura del líder venezolano fue duplicada de 25 a 50 millones de dólares.
La orden secreta de Trump marca un punto de inflexión en la estrategia antidrogas de Estados Unidos, proyectando una sombra de incertidumbre sobre la soberanía de las naciones latinoamericanas y el futuro del derecho internacional. ¿Podría esta directriz, que elude la supervisión congresional, abrir la puerta a una era de intervenciones militares no consensuadas en la región?
