
En un operativo crítico, autoridades federales, encabezadas por personal de la Fiscalía General de la República (FGR), desmantelaron un narcolaboratorio en el poblado de Carricitos en el municipio de Tamazula, Durango. Esta acción representa una afectación económica significativa a los grupos criminales.
Desmantelamiento en Tamazula, Durango
Según lo dado a conocer por Omar García Harfuch, titular de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC), a través de su cuenta de “X”, la operación fue resultado de la coordinación entre elementos de la Agencia de Investigación Criminal y las secretarías de la Defensa Nacional (Defensa) y de Marina-Arañada de México (Semar). Se cumplimentó una orden de cateo en Tamazula, Durango, que derivó en el desmantelamiento de un laboratorio dedicado a la producción de drogas sintéticas y una pista clandestina.
El aseguramiento y la afectación económica
El operativo, detallado por García Harfuch, permitió asegurar cantidades relevantes de sustancias y precursores.
Los aseguramientos incluyeron:
- 150 kilos de metanfetamina
- 5 mil 310 litros de sustancias para elaboración de esta droga
- 870 kilos de sustancias para elaboración de esta droga
Omar García Harfuch destacó el impacto de este aseguramiento:
“Con este aseguramiento se evitó la producción de 2.88 toneladas de metanfetamina que no llegarán a manos de las y los jóvenes. Esto representa una afectación económica de 966 millones de pesos a la delincuencia organizada”.
Equipamiento especializado
Las autoridades federales también aseguraron una variedad de equipos y materiales utilizados en la producción de drogas sintéticas en el narcolaboratorio Durango:
- Dos reactores de síntesis orgánica
- 34 costales con sustancia cristalina
- 59 bidones con diferentes sustancias
- Nueve tinas
- Cuatro bolsas con peróxido
- Dos charolas de plástico
- Centrifugadoras artesanales
- 10 tanques de gas LP
- Ventiladores
- Quemadores
- Destiladores
- Un generador eléctrico
- Dos revolvedores
- Una báscula
La operación en Durango subraya la persistencia de la infraestructura de producción de drogas sintéticas y la relevancia de los operativos conjuntos para impactar las finanzas de los grupos criminales, según los datos proporcionados.