El mundo del diseño y la arquitectura global llora la pérdida de Frank Gehry, el genio detrás del icónico Museo Guggenheim de Bilbao, fallecido este viernes a los 96 años. Este arquitecto estadunidense-canadiense, que alcanzó el estatus de superestrella, deja un legado de formas esculturales y deconstructivistas que redefinieron el urbanismo moderno. Su muerte, tras una breve enfermedad respiratoria, marca el final de una era creativa.
El fin de una era: fallece Frank Gehry en Santa Mónica
Frank Gehry, el aclamado arquitecto conocido por sus diseños audaces y fluidos, falleció este viernes 5 de diciembre de 2025 en su casa de Santa Mónica a la edad de 96 años. Su oficina confirmó el deceso mediante un correo electrónico, indicando que ocurrió «tras una breve enfermedad respiratoria».
Gehry, cuyo nombre completo era Frank Owen Gehry, nació en 1929 en Toronto, Canadá. En 1947, se trasladó a Los Ángeles con sus padres, adoptando posteriormente la nacionalidad estadunidense. Su formación fue rigurosa:
- Se graduó en Arquitectura en 1954 en la Universidad de Baja California.
- Tras completar el servicio militar, estudió Urbanismo en Harvard.
Su carrera profesional comenzó en el estudio de Victor Gruen, al que regresó después de sus estudios en Harvard. Un periodo crucial de su formación se dio en 1961, cuando se trasladó a París junto a su mujer y sus dos hijas, trabajando por un año con André Rémondet. Finalmente, en 1962, estableció su propio estudio en Los Ángeles, Frank O. Gehry and Associates, desde donde desarrolló proyectos a lo largo de cinco décadas en América, Europa y Asia.
La consagración del deconstructivismo
Gehry comenzó a destacar en la década de los 70 por el uso de materiales industriales poco comunes combinados con titanio y vidrio para crear edificios de formas esculturales. A finales de los años 80, su nombre se consolidó como una figura clave del movimiento deconstructivista.
Este lenguaje formal se caracteriza por la fragmentación y la ruptura de un proceso de diseño lineal, dando como resultado estructuras con una apariencia visual impactante.
Obras emblemáticas y el impacto global de la arquitectura de Gehry
Entre sus creaciones más influyentes, que se consideran hitos del diseño mundial, se encuentran:
- Museo Guggenheim de Bilbao, España (1997).
- Walt Disney Concert Hall en Los Ángeles (2003).
- El edificio Nationale-Nederlanden, mejor conocido como Casa Danzante, en Praga (1996).
A lo largo de su trayectoria, Gehry dejó una vasta colección de trabajos que transformaron el paisaje urbano:
- Museo Aeroespacial de California (1984).
- Museo Vitra Design, en Weil am Rhein, Alemania (1989).
- Museo de Arte Frederick Weisman en Minneapolis (1993).
- Edificio del Banco DZ en Berlín (1998).
- Torre Gehry en Hannover (2001).
- Centro Stata del Instituto Tecnológico de Cambridge (2003).
- Centro Maggie’s Dundee en Escocia (2003).
En España, también dejó su huella con la inauguración en 2006 de las bodegas de Herederos del Marqués de Riscal en Elciego (Álava), además de proyectar la Torre de Sagrera en Barcelona.
Diseño y proyectos pendientes
El arquitecto estadunidense-canadiense también incursionó en otras áreas del diseño, desarrollando la colección de mobiliario Easy Edges en los 70, formada por 14 piezas de cartón concebidas como una línea de bajo coste, a la que siguió la línea Experimental Edges, con un enfoque más artístico.
Entre sus proyectos más recientes o en desarrollo antes de su fallecimiento se incluyen:
- Un museo de arte contemporáneo en París para la Fundación Louis Vuitton.
- El diseño de su primer parque infantil en Nueva York, en el extremo sur de la isla de Manhattan, conocido como The Battery.
- La reforma y recuperación del Parque Mayer de Lisboa, que abarcó la restauración del Teatro Capitolio.
A la fecha de su muerte, Gehry se encontraba trabajando en varios proyectos de gran magnitud, como el diseño del Eisenhower Memorial, que se prevé construir en Washington; el West Campus que Facebook edificará en la localidad californiana de Menlo Park; y el proyecto de una torre residencial en Berlín, que está destinada a convertirse en el rascacielos más alto de la ciudad.
Su obra ha sido ampliamente documentada y estudiada; en 2006, el director de cine Sydney Pollack estrenó en Cannes el documental Sketches of Frank Gehry. Ese mismo año, Gehry presentó su proyecto para el nuevo Museo Guggenheim de Abu Dabi, y en 2008 diseñó el pabellón del Serpentine Gallery en el Hyde Park de Londres. En 2012, inauguró el primer edificio residencial de su autoría en Asia, la torre Opus Hong Kong.
Un legado que desafió la gravedad
La muerte de Frank Gehry deja un vacío en el panorama arquitectónico mundial. Sus estructuras, que parecen bailar o retorcerse, no solo fueron ejercicios estéticos, sino declaraciones funcionales y culturales que cambiaron la percepción de lo que un edificio puede y debe ser. ¿Cómo se recordará al hombre que enseñó al mundo que el titanio y el vidrio podían generar poesía urbana, y cuál será el destino de los ambiciosos proyectos que dejó inconclusos?
