
La política nacional vuelve a agitarse ante los señalamientos contra Hernán Bermúdez Requena, ex jefe de la policía de Tabasco. Ante las serias acusaciones, Morena fija su postura en el polémico caso Bermúdez Requena, prometiendo total transparencia y apoyo a las investigaciones hasta sus últimas consecuencias.
Morena y el compromiso con la transparencia: “Que tope hasta donde tope”
El 17 de julio de 2025, en Ciudad de México, el vocero del grupo parlamentario de Morena en la Cámara de Diputados, Arturo Ávila, abordó la situación de Hernán Bermúdez Requena, ex jefe de la policía del estado de Tabasco. Bermúdez Requena es señalado por presuntamente formar parte de un grupo del crimen organizado y se encuentra actualmente prófugo de la justicia.
Ávila afirmó categóricamente que Morena “no será tapadera ni comparsa de nadie”. En este sentido, aseguró que el partido respaldará que las investigaciones de las fiscalías de Tabasco y General de la República (FGR) sigan su curso “tope hasta donde tope”.
En una extensa conferencia de prensa en San Lázaro, el legislador fue interrogado insistentemente sobre la posición de Morena frente a las acusaciones que enfrenta Bermúdez Requena, así como las posibles implicaciones para Adán Augusto López Hernández, quien lo habría designado como jefe policiaco en Tabasco. “Nosotros hemos dicho que no somos tapadera absolutamente de nadie. Y donde hay una investigación en donde alguien comete algún delito o en donde alguien comete alguna falta administrativa, este movimiento no va a ser comparsa”, aseveró Ávila.
El vocero guinda recalcó que el caso de Bermúdez “es un caso que inicia en una investigación de un gobierno morenista —sí, con una fiscalía autónoma, por supuesto, hay que decirlo—. Pero es un caso en donde quien contribuye, quien aporta los datos es el Gobierno Federal a través de oficinas de inteligencia”.
Desmarcando el caso Bermúdez de la “órbita García Luna”
Una de las principales líneas de cuestionamiento hacia Morena giró en torno a la posible comparación del caso de Bermúdez Requena con el de Genaro García Luna, ex funcionario condenado y sentenciado en Estados Unidos por colaborar con el narcotráfico. Arturo Ávila negó rotundamente cualquier paralelismo, insistiendo en una “enorme diferencia” entre ambos escenarios.
Ávila enfatizó: “No es lo mismo, empezando porque nosotros sí estamos persiguiendo a una persona que cometió un ilícito. Segundo, las investigaciones las está llevando la fiscalía (de Tabasco y General de la República) y que tope hasta donde tope”. De igual forma, el vocero subrayó que Morena “jamás será tapadera de nadie, como sí lo fue Acción Nacional” en el caso de García Luna.
La situación de Adán Augusto López Hernández
La designación de Bermúdez Requena por parte de Adán Augusto López Hernández, ex secretario de Gobernación durante el gobierno de Andrés Manuel López Obrador, ha puesto al actual coordinador de los senadores morenistas y presidente de la Junta de Coordinación Política del Senado en el ojo del huracán.
Ávila hizo énfasis en que actualmente “no se está investigando al coordinador (de los senadores morenistas, Adán Augusto López), al presidente de la Junta de Coordinación Política del Senado”.
Negación de “desaparición” y contratación de buena fe
En la primera conferencia de prensa semanal del grupo parlamentario guinda a la cual no asistió su coordinador, Ricardo Monreal –quien no estuvo presente porque “está escribiendo un libro”–, el vocero negó que López Hernández esté desaparecido. “Ahí está, aquí está trabajando en sus encomiendas como presidente de la Junta de Coordinación Política. Ese es un invento también de la oposición”, sentenció.
Cuestionado de manera insistente al respecto, Ávila Anaya rechazó que se pueda responsabilizar al ex secretario de Gobernación de contratar a Bermúdez Requena a sabiendas de que estaba vinculado con el grupo delincuencial La Barredora. “Yo asumo que siempre en este tipo de encargos hay una contratación de buena fe. Y en esta lógica también asumo que, pues, no tenía conocimiento —asumo, no lo sé—, porque de lo contrario también estoy seguro que lo hubiera separado de su cargo y que hubiera iniciado una investigación inmediata. Lo asumo también”, atajó.
La orden de aprehensión y el futuro de la investigación
Al preguntársele por qué no se ordenó sancionar a Bermúdez con prisión preventiva oficiosa, si ya había elementos para sospechar de él, el vocero morenista evadió el cuestionamiento. Afirmó: “Lo que sí sé es que hay una orden de aprehensión, que un gobierno de Morena está persiguiendo a un funcionario público que, lamentablemente, no hizo bien su trabajo. Y lo que también estoy cierto es que, seguramente, será atrapado en breve y será llevado ante la justicia para que responda”.
Con respecto a la posibilidad de que López Hernández sea citado por la FGR para declarar sobre el caso de Bermúdez, Ávila nuevamente optó por no pronunciarse directamente sobre el tema. “Me parece muy irresponsable de mi parte hacer un juicio de valor si no conozco la carpeta de investigación. Si yo conociera la carpeta de investigación, sí podría atreverme a emitir, a lo mejor, algún posicionamiento personal. En esa lógica, esperaré con mucha atención el informe que va a presentar la autoridad la próxima semana acerca de este asunto. Y creo que a todos nos va a dar más información para no estar especulando”, concluyó.
Cabe señalar que Morena suspendió los derechos partidarios del ex secretario de Seguridad de Tabasco, Hernán Bermúdez Requena, en relación con este caso.
En la esfera política mexicana, el caso Bermúdez Requena sigue siendo un punto de alta tensión, poniendo a prueba la narrativa de transparencia y combate a la corrupción del partido en el poder. ¿Logrará Morena demostrar su compromiso con la justicia sin importar las implicaciones internas, o la sombra de casos pasados seguirá condicionando el debate público?