
México respira: fuera del golpe arancelario de EE.UU.
En un giro clave para la economía nacional, México quedó excluido del nuevo arancel global del 10% que Estados Unidos anunció con efecto inmediato. La noticia, que inicialmente generó incertidumbre, fue confirmada desde Washington por el propio canciller Marcelo Ebrard.
Un anuncio con impacto regional inmediato
La confusión inicial y el mensaje desde Washington
La noticia se propagó velozmente luego de que el secretario del Tesoro de EE.UU., Scott Bessent, respondiera afirmativamente cuando se le preguntó si México y Canadá estaban incluidos en la medida.
Sin embargo, la Casa Blanca corrigió poco después: ambos países quedaron fuera del alcance del nuevo arancel.
Este tipo de medidas genera siempre alta sensibilidad en el sur del país, especialmente en sectores exportadores con fuerte dependencia del comercio bilateral.
En estados como Yucatán y Quintana Roo, donde crece la participación en industrias logísticas y manufactureras, la exclusión representa un alivio frente a posibles repercusiones.
Ebrard confirma exclusión: “No estamos incluidos”
Fue Marcelo Ebrard quien, desde su cuenta oficial en X, despejó las dudas:
“Desde Washington me informan oficialmente que no estamos incluidos en los aranceles recíprocos de 10% anunciados el día de hoy. Saludos.”
Este mensaje confirmó que México no enfrentará el arancel global, evitando un posible efecto dominó en precios, empleos e inversión en el corto plazo.
Contexto económico: ¿por qué importa tanto esta decisión?
Lo que significa quedar fuera del arancel del 10%
La medida anunciada por Estados Unidos busca establecer un impuesto uniforme del 10% sobre productos extranjeros. En ese entorno, la exclusión de México refuerza su posición estratégica en la región y evita una ruptura en cadenas de valor clave, sobre todo en manufactura, agroindustria y tecnología.
Además, permite mantener la competitividad en comparación con otras economías que sí enfrentan el nuevo costo de entrada al mercado estadounidense.
Implicaciones para el sur del país
Empresarios y autoridades del Caribe Mexicano han insistido en diversificar exportaciones y atraer inversión hacia sectores de alto valor. Esta decisión facilita esos esfuerzos.
Evita presiones inmediatas sobre los costos de exportación e inyecta confianza en los inversionistas, especialmente en polos industriales emergentes como Progreso (Yucatán) o Chetumal (Quintana Roo).
¿Qué sigue para México en la relación comercial?
Ventana de oportunidad para la diplomacia económica
La exclusión no es fortuita: responde a la cooperación estratégica en materia comercial, energética y de seguridad. México debe aprovechar esta ventana para fortalecer su papel dentro del T-MEC y defender su acceso preferencial a uno de los mercados más importantes del mundo.
Riesgos latentes: el contexto electoral en EE.UU.
Aunque hoy se celebra la exención, el panorama sigue siendo volátil. La medida podría reconfigurarse si cambian los vientos políticos en Washington, donde el ciclo electoral está en marcha. La diplomacia mexicana deberá estar alerta para evitar un eventual cambio de postura en futuros paquetes de medidas.
Un respiro, pero no un descanso
La noticia de que México quedó fuera del arancel global del 10% es positiva, pero no definitiva. El escenario comercial global cambia con rapidez, y este tipo de decisiones pueden revertirse.
El reto ahora será aprovechar esta ventaja para consolidar la presencia mexicana en el mercado estadounidense y seguir construyendo puentes sólidos que resistan coyunturas adversas.