
No todo son nubarrones en la unidad de Morena, justo cuando parece que el partido hegemónico comienza a resquebrajarse.
Una parte de la disidencia ha terminado por disciplinarse.
Se trata de la maestra Maricruz Carrillo, quien había sostenido una intensa ofensiva contra los liderazgos fácticos e informales de Morena y el Bipartito.
De hecho, la también dirigente magisterial fue precandidata fugaz del extinto partido local MAS a la presidencia municipal. Pero dio un paso al costado al confirmar que dicho partido coqueteaba cómodamente con Morena.
Parece que la exregidora y exsecretaria municipal de Desarrollo Social ya no quiere seguir en el equipo perdedor.
En redes sociales ha dejado clara su plena adhesión al senador Eugenio “Gino” Segura, de la cantera verde y pre-precandidato de la “22 de Enero”.
Incluso hay quienes aseguran que fue pieza clave para que el magisterio de Cancún depusiera sus protestas, tras casi dos meses de paro.
Pero suele pasar: los valientes radicalismos terminan en bochornosos colaboracionismos.