
Una historia de nostalgia, taquilla récord y crítica dividida
Una criatura azul intergaláctica, una niña hawaiana y la promesa de una ‘ohana’ que lo resiste todo. A más de 20 años del estreno original, Lilo & Stitch regresa a la gran pantalla en formato live-action, generando una tormenta perfecta de emociones, expectativas y cifras millonarias.
Lo que comenzó como una apuesta más del extenso catálogo de remakes de Disney, hoy amenaza con romper el récord histórico de taquilla del Memorial Day, superando incluso a gigantes como Top Gun: Maverick.
Un debut taquillero que desafía las expectativas
Con solo un día en cartelera, la nueva Lilo & Stitch ya recaudó 111 millones de dólares a nivel mundial, incluyendo 55 millones solo en Reino Unido. Se estima que alcanzará entre 175 y 180 millones de dólares para el lunes, lo que superaría el récord de Top Gun: Maverick ($160 millones).
Este desempeño es aún más sorprendente considerando el aluvión de críticas negativas que ha recibido desde su estreno.
“Una parodia… insulsa y comercial”, escribió Clarisse Loughrey para The Independent, calificándola con una estrella.
La crítica especializada parece haber fallado en anticipar el pulso de la audiencia. Mientras los expertos la acusan de ser una versión diluida del clásico de 2002, el público la ha respaldado con fuerza.
¿Por qué el público ama lo que la crítica odia?
El poder de la nostalgia bien administrada
A diferencia de otras adaptaciones live-action, esta versión mantiene intactos muchos elementos clave del filme original. Según varios fans en redes sociales:
“La mayoría de las escenas son idénticas a la animación… eso la hizo más emotiva.”
Esta fidelidad narrativa y visual, sumada a un reparto que ha sido bien recibido por el público (especialmente Maia Kealoha como Lilo y Sydney Agudong como Nani), ha jugado un papel esencial en su aceptación.
Una voz que conecta con la memoria
Chris Sanders, creador original y voz de Stitch, retoma su papel en esta nueva entrega. Su participación le da autenticidad al personaje y funciona como un puente emocional entre generaciones.
“Personalmente, me encantó. Lilo y Nani son FANÁTICOS. ¡Qué buena pareja!”, escribió un usuario en X.
¿Fracaso crítico, éxito comercial?
La brecha entre la crítica y la audiencia
En Rotten Tomatoes, la película tiene 69% de aprobación crítica frente a un imponente 93% de aceptación del público. Esta brecha evidencia un fenómeno recurrente: la desconexión entre el gusto popular y el juicio de los expertos.
Y aunque los analistas cuestionan su profundidad y originalidad, los números no mienten. Disney ha vuelto a demostrar que, con una IP poderosa y una ejecución mínimamente competente, puede dominar la taquilla global.
Disney ya piensa en secuelas: ¿Un nuevo universo expandido?
Más allá del remake
Jonathan Eirich, productor de la cinta, sugirió antes del estreno que el universo de Lilo & Stitch tiene potencial para expandirse.
“Es un mundo tan rico… Hacemos un breve guiño a Angel y Leroy. Hay otros temas que se podrían tocar.”
Este guiño a personajes secundarios como Angel y Leroy, vistos en series y películas posteriores, sugiere que Disney ya siembra las semillas para una franquicia ampliada.
Y si el éxito se confirma este fin de semana, la continuidad será casi inevitable.
¿Qué significa este fenómeno para el futuro de los remakes?
Un modelo probado (y criticado)
Disney ha convertido el remake live-action en un pilar de su estrategia. Desde El Rey León hasta La Sirenita, el estudio ha explotado sus franquicias animadas con resultados mixtos.
Pero Lilo & Stitch podría marcar una nueva etapa: una donde el público, no la crítica, defina qué merece una secuela.
“No fue el fin del mundo ni arruinó la película… sinceramente, el mejor remake de acción real que ha hecho Disney”, sentenció un fan.
¿Quién tiene la última palabra?
Lilo & Stitch llegó en silencio y con pocas expectativas. Hoy, se proyecta como uno de los mayores éxitos comerciales del año. La paradoja es evidente: cuanto más la critica la crítica, más la abraza la audiencia.
En tiempos donde las plataformas dictan tendencia y el algoritmo define lo visible, el remake de esta entrañable historia nos recuerda que, al final, la conexión emocional sigue siendo el motor más poderoso del cine.
La película ya se exhibe en todos los cines de México. Verla —o no— será una decisión personal. Pero lo cierto es que Stitch ha vuelto. Y esta vez, vino por la corona.