El boxeo profesional se despide de una de sus leyendas más recientes. Terence Crawford, uno de los campeones más dominantes de la historia, anunció su retiro sin haber conocido la derrota. El boxeador de Omaha cuelga los guantes tras dejar un récord impoluto y una hazaña inigualable en el deporte.
La inmaculada despedida de un campeón indiscutido
El 16 de diciembre de 2025, el histórico boxeador Terence Crawford reveló su adiós a través de un video publicado en su canal de YouTube. El anuncio se produjo tan solo tres meses después de conseguir su última gran hazaña al derrotar al mexicano Saúl ‘Canelo’ Álvarez por el campeonato indiscutido de peso supermediano.
Crawford (cuya edad fue reportada como 30 años por una fuente y 38 años por otra) se retira con un récord invicto de 42-0, sumando 31 victorias por nocaut. Su carrera, que comenzó profesionalmente en 2008 tras no clasificar al equipo olímpico estadounidense, culminó con una serie de logros sin precedentes:
- Es el único boxeador en la era de los cuatro cinturones en ser campeón indiscutido en tres categorías de peso.
- Conquistó 18 títulos mundiales en cinco categorías: ligero, superligero, wélter, superwélter y supermediano.
- Nunca fue derribado oficialmente en ningún combate.
El púgil de Omaha, Nebraska, se une así a una selecta lista de peleadores que terminaron su carrera invictos, donde destacan nombres como Rocky Marciano, Floyd Mayweather Jr., Andre Ward y Edwin Valero.
La triple corona de la unificación
La consolidación de Crawford como una leyenda se forjó a través de sus unificaciones indiscutidas en tres divisiones distintas:
- Peso supermediano (168 libras): Lograda al imponerse por decisión unánime a Canelo Álvarez en septiembre (específicamente el 13 de septiembre de 2025).
- Peso wélter: Obtuvo todos los cetros al derrotar a Errol Spence Jr. por nocaut en julio de 2023.
- Peso superligero: Se coronó campeón indiscutido al vencer a Julius Indongo en agosto de 2017.
Su primera corona mundial llegó en 2014, cuando conquistó el título de peso ligero de la Organización Mundial de Boxeo (OMB) al derrotar al escocés Ricky Burns.
El conflicto con el CMB: un retiro bajo sus propios términos
El repentino adiós de los cuadriláteros se produce semanas después de que el campeón de cinco divisiones fuera despojado del cinturón supermediano del Consejo Mundial de Boxeo (CMB).
El organismo tomó esta determinación por, supuestamente, incumplir con el pago de las cuotas de sanción correspondientes a sus últimas peleas, incluido el choque ante Canelo Álvarez. Con esta acción, la división de las 168 libras queda oficialmente sin monarca.
La disputa escaló cuando el presidente del CMB, Mauricio Sulaimán, acusó públicamente al boxeador. Crawford respondió con una declaración explosiva sobre el requerimiento de pago de 300 mil dólares de su supuesta bolsa de 50 millones por la pelea contra el tapatío:
> “¿Quién demonios te crees que soy? ¡Vaya, mejor que te des una bofetada! No te voy a pagar nada. ¿De qué hablas? ¿Pagarte 300 mil dólares? ¿Qué te hace mejor que cualquier otro organismo regulador? Contesta esa pregunta. Todos aceptaron lo que les daba. Puedes llevarte el maldito cinturón, es un trofeo de todos modos. ¿Por qué te pago cada vez que subo al ring? Soy yo el cabrón que se juega el pellejo, no tú.”
El mensaje de despedida
Las palabras de Crawford en su video revelan la mentalidad detrás de su decisión de terminar su carrera en sus términos y no por una derrota o impedimento físico.
> «Me retiro de la competición, no porque haya terminado de pelear, sino porque he ganado otro tipo de batalla. La de retirarme en mis propios términos. Esto no es un adiós, es el final de una pelea y el comienzo de otra… Le di a este deporte cada aliento que tenía. Cada cicatriz, cada triunfo, cada gramo de mi corazón. He hecho las paces con lo que viene. Y ahora, es el momento. Gracias», dijo.
El boxeador de Terence Crawford también hizo una reflexión sobre su motivación: «Pasé toda mi vida persiguiendo algo, no cinturones, ni dinero, ni titulares. Sino esa sensación, la que se siente cuando el mundo duda de ti, pero sigues adelante y demuestras que todos están equivocados. Luché por mi familia, por mi ciudad y por el niño que fui, el que no tenía nada más que un sueño y un par de guantes. Y lo hice todo a mi manera».
Aunque se barajaba la posibilidad de una revancha ante Canelo o un posible combate ante Jake Paul, estos quedaron solo en negociaciones. Crawford se despide declarando que ya no tiene «nada más que demostrar», dejando una de las carreras más sólidas y dominantes en la historia moderna del boxeo profesional.
El retiro de Terence Crawford, marcado por la controversia del CMB, subraya la profunda brecha entre la gestión deportiva y la ambición de los atletas que, incluso en la cima, eligen terminar su legado sin conceder la última palabra a las instituciones. ¿Logrará el CMB recuperar la autoridad en la división supermediana, o el desafío de Crawford marca un precedente sobre el verdadero valor de los campeonatos?
