El Banco Central de Brasil ha mantenido la tasa de interés de referencia (Selic) en un elevado 15 por ciento. Esta decisión, que marca el nivel más alto desde julio de 2006, intensifica la tensión con el gobierno de Luiz Inácio Lula da Silva, quien ha solicitado recortes para estimular el crecimiento de la primera economía de América Latina.
La tensión entre el palacio de gobierno y el Banco Central
El miércoles 10 de diciembre de 2025, el Banco Central de Brasil ratificó la decisión de mantener la tasa Selic en 15 por ciento. Este movimiento, orientado a contener la inflación, contradice directamente los deseos del gobierno del izquierdista Luiz Inácio Lula da Silva.
Desde que llegó al poder en 2023, el presidente Lula da Silva ha solicitado reiteradamente un recorte en la tasa base. Su objetivo es inyectar impulso y estimular la economía del gigante suramericano, la cual ha mostrado señales de desaceleración.
Una Selic en máximos históricos
La tasa Selic se mantiene en un punto que no se veía desde hace casi dos décadas, superando el nivel registrado en julio de 2006, cuando alcanzó 15.25 por ciento.
El Comité de Política Económica (Copom) del Banco Central justificó su postura argumentando que:
- “Los riesgos para la inflación, tanto de alta como de baja, siguen más elevados de lo usual”, según se indicó en una nota oficial.
- El Comité considera que la estrategia de mantener el nivel actual de las tasas de interés por un periodo bastante prolongado es adecuada para garantizar que la inflación converja hacia la meta.
Esta estrategia de tasas altas ha sido consistente. El Banco Central brasileño elevó la Selic siete veces consecutivas entre septiembre de 2024 y junio de 2025. Posteriormente, la dejó sin cambios en julio, septiembre y noviembre pasados. El Copom volverá a reunirse en enero de 2026.
Datos de la inflación y expectativas del mercado
La decisión del Comité está en línea con lo anticipado de forma casi unánime por el mercado financiero. Una encuesta del diario Valor Económico, que consultó a más de un centenar de instituciones financieras, había pronosticado este mantenimiento.
Las autoridades monetarias brasileñas tienen como objetivo reducir la inflación para ubicarla en el rango de tolerancia oficial, que oscila entre 1.5 y 4.5 por ciento.
Desaceleración y pronósticos económicos
Los datos más recientes de la inflación muestran que los esfuerzos del Banco Central comienzan a rendir frutos.
- Brasil registró en noviembre de 2025 una inflación interanual de 4.46 por ciento.
- Este dato significó que, por primera vez en el año, la inflación se situó dentro del rango esperado por el Banco Central.
Asimismo, las instituciones financieras consultadas por el boletín Focus del Banco Central redujeron su estimación de inflación para 2025 a 4.40 por ciento.
Sin embargo, el mantenimiento de estas altas tasas contribuye a una pérdida de impulso de la actividad económica brasileña. El producto interno bruto (PIB) creció 1.8 por ciento interanual en el tercer trimestre de 2025, aunque esto representó una desaceleración respecto al segundo trimestre.
Esta postura firme no es nueva. Ya en su reunión de septiembre, el Copom había anunciado que la tasa Selic se mantendría en 15 por ciento anual durante “un periodo prolongado”, una promesa que se ha cumplido, manteniendo la presión sobre el crecimiento deseado por el presidente Lula da Silva.
La persistencia de la tasa Selic en 15 por ciento subraya la lucha prioritaria del Banco Central de Brasil contra la inflación, incluso a costa de la pérdida de impulso económico. La fotografía muestra una marcada divergencia de estrategias: ¿podrá el gobierno de Luiz Inácio Lula da Silva encontrar un mecanismo de estímulo que compense el rigor monetario, o esta prolongada estrategia de tasas altas terminará por frenar la ambición de crecimiento del gigante latinoamericano?










