El senador Néstor Camarillo Medina ha renunciado al Partido Revolucionario Institucional, una decisión personal y congruente que busca abrazar una agenda ciudadana. Su salida impacta la fuerza del PRI en el Senado, reduciendo su bancada y su posición en la Mesa Directiva. Esta renuncia Néstor Camarillo PRI genera expectativas sobre una nueva oposición.
La trascendental decisión de Néstor Camarillo
Néstor Camarillo Medina, senador por el Partido Revolucionario Institucional, confirmó su renuncia a la militancia priista. El legislador hizo pública esta decisión personal, libre y congruente a través de sus redes sociales el Lunes, 25 de agosto de 2025, dirigiéndose a los ciudadanos de Puebla con el mensaje: «#Puebla 🇲🇽, tengo un mensaje importante que compartirles:».
En su comunicado, Camarillo Medina expresó: «Tomo la decisión de renunciar a mi militancia y abrazar una verdadera agenda ciudadana; en una decisión personal, libre y congruente, he decidido evolucionar, seguir del lado de la gente, pero sobre todo a lo que nunca voy a renunciar es a encabezar a una oposición responsable e inteligente que necesita Puebla y necesita México».
El impacto en la bancada del PRI en el Senado
Esta relevante renuncia Néstor Camarillo PRI trae consigo directas implicaciones para el Partido Revolucionario Institucional en la Cámara Alta. La decisión del senador Camarillo Medina impacta significativamente la composición de la bancada.
Reducción a 13 miembros
Con la salida de Néstor Camarillo, la bancada del Partido Revolucionario Institucional en el Senado se reduce a 13 miembros. Esta disminución numérica representa un golpe para la fuerza legislativa del partido en la Cámara Alta.
Pérdida de posición en la mesa directiva
Además de la reducción de sus miembros, la bancada priista en la Cámara Alta también perderá su lugar en la Mesa Directiva. Esta situación se suma a la reconfiguración interna que enfrenta el partido tras la renuncia de uno de sus senadores. Esta información fue corroborada al señalarse que el «PRI en el Senado se queda con 13 miembros tras renuncia de Néstor Camarillo».
La partida de Néstor Camarillo abre un nuevo capítulo en el panorama político, planteando la pregunta fundamental: ¿cómo se redefinirá la oposición en México ante este tipo de movimientos individuales, y qué consecuencias tendrá para la gobernabilidad del país.
