La canasta alimentaria en México experimentó incrementos significativos en julio de 2025, según el primer informe de Líneas de Pobreza del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi). En el ámbito rural, el costo anual subió 2.9%, mientras que en el urbano alcanzó un 4.3%, impactando directamente el bolsillo de los hogares.
Impacto de la canasta alimentaria en julio de 2025
En julio de 2025, una persona en México requería mil 856.91 pesos para adquirir la canasta alimentaria en el ámbito rural y 2 mil 453.34 pesos en el urbano. Estos valores representaron un aumento anual de 2.9 y 4.3 por ciento, respectivamente, información divulgada por el Inegi en su informe de Líneas de Pobreza.
El incremento en el ámbito rural se ubicó por debajo de la inflación general anual del país, que fue de 3.5 por ciento en julio de 2025. En contraste, el aumento en el ámbito urbano superó la inflación en 0.8 puntos porcentuales.
Factores detonantes del incremento
Los rubros de alimentos y bebidas consumidas fuera del hogar, así como el de bistec de res, fueron los que más contribuyeron al aumento anual de la canasta alimentaria, tanto en el ámbito rural como en el urbano. Estos presentaron un cambio porcentual anual en el precio de 7.8 y 18 por ciento, respectivamente. No obstante, ambos mostraron una mayor incidencia en el ámbito rural.
En el ámbito rural, la carne molida de res fue el tercer rubro con mayor contribución al aumento de la canasta alimentaria, registrando un 16.6 por ciento. En el urbano, la leche pasteurizada de vaca fue la principal contribuyente con un 8.3 por ciento. Tan sólo el valor monetario mensual de los alimentos y bebidas consumidas fuera del hogar fue de 408.10 pesos en el ámbito rural y de 748.90 pesos.
Las líneas de pobreza por ingreso: Más allá de los alimentos
Los cambios porcentuales anuales de las Líneas de Pobreza por Ingreso (LPI), que se basan en la canasta alimentaria y en la no alimentaria, fueron de 3.1 por ciento en el ámbito rural y 3.6 por ciento en el urbano. El incremento en el ámbito rural fue menor a la inflación general anual (3.5 por ciento), mientras que el del urbano fue superior en 0.1 puntos porcentuales.
La variación anual de las LPI respecto al mismo mes del año anterior disminuyó 3 puntos porcentuales en el ámbito rural y 2.4 en el urbano, situándose en 6.1 por ciento en ambos ámbitos. Los productos que conforman la canasta alimentaria fueron los que más contribuyeron al cambio anual de las LPI, con una incidencia mayor en el ámbito urbano (61 por ciento) que en el rural (51.1 por ciento).
Incidencia de la canasta no alimentaria
Respecto a la canasta no alimentaria, destacaron los rubros de cuidados personales y de educación, cultura y recreación por ser los de mayor incidencia en el ámbito rural. En el urbano, por su parte, sobresalieron los de educación, cultura y recreación, así como los de vivienda y servicios de conservación.
Contexto económico adicional: combustibles
Aunado a lo anterior, en julio de 2025, los precios en combustibles, específicamente la gasolina magna, experimentaron una caída del 1.2 por ciento. Esta disminución se suma a más de tres años de descensos continuos, con la única excepción de mayo de 2025, cuando se registró un ligero aumento de 0.5 por ciento.
El nuevo rol del INEGI en la medición de la pobreza
Hasta el 2024, el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval) era el organismo público descentralizado encargado de medir la pobreza laboral y las líneas de pobreza por ingreso. Las Líneas de Pobreza (LP) ofrecen un referente monetario crucial para determinar si los ingresos de la población son suficientes para adquirir las canastas alimentaria y no alimentaria. Además, sirven como umbral para la medición de la Pobreza Multidimensional en México en el espacio de bienestar económico.
El Inegi asumió atribuciones en materia de medición de pobreza conforme a las reformas a la Ley General de Desarrollo Social, la Ley Federal de Presupuesto y Responsabilidad Hacendaria, y la Ley General de Contabilidad Gubernamental, las cuales entraron en vigor el pasado 17 de julio de 2025. En este marco, se da a conocer la actualización de las Líneas de Pobreza, según ámbito rural y urbano, correspondiente a julio de 2025. El cálculo se realiza con base en el Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC).
Estas mediciones son cruciales para comprender la realidad económica de los hogares mexicanos, especialmente en un contexto de cambio en las atribuciones institucionales. La transparencia y precisión de estos datos, ahora bajo la responsabilidad del Inegi, son fundamentales para la formulación de políticas públicas que impacten directamente el bienestar de la población.
