París, 17 de septiembre de 2025. Un avance monumental en la inteligencia artificial (IA), liderado por científicos internacionales, promete revolucionar la medicina preventiva. Se ha desarrollado un modelo, Delphi-2M, capaz de anticipar diagnósticos médicos con años de antelación, ofreciendo una nueva esperanza frente a las enfermedades.
La irrupción de Delphi-2M: El ChatGPT de la salud
Científicos de instituciones del Reino Unido, Dinamarca, Alemania y Suiza anunciaron este miércoles la creación de Delphi-2M, un modelo de inteligencia artificial que predice la prevalencia de más de mil enfermedades con años de antelación. Este innovador sistema, basado en la misma tecnología que ChatGPT de OpenAI, fue presentado en un estudio publicado por la prestigiosa revista Nature.
Para su entrenamiento, Delphi-2M recurrió a los antecedentes médicos de cerca de medio millón de pacientes de la base de datos biomédicos UK Biobank. Utilizando una tecnología similar a los modelos de lenguaje basados en contenidos textuales, esta IA procesó una vasta cantidad de historiales clínicos.
Decodificando el historial clínico
Moritz Gerstung, especialista en IA del Centro Alemán de Investigación contra el Cáncer, explicó que comprender una secuencia de diagnósticos médicos equivale a «aprender la gramática de un texto». Gracias a este entrenamiento, Delphi-2M «aprende a detectar esquemas en los datos sanitarios, antes de los diagnósticos, y en qué combinaciones y sucesiones se producen», lo que permite «predicciones muy significativas y relevantes para la salud».
El especialista ilustró cómo la IA podría identificar a individuos con un riesgo de sufrir un infarto más o menos elevado de lo que podrían predecir factores tradicionales como la edad o datos clínicos estándar.
Potencial predictivo y validación masiva
Las capacidades de Delphi-2M fueron puestas a prueba con los datos sanitarios de casi dos millones de personas en Dinamarca, demostrando su robustez y precisión en un entorno real. Este modelo se diferencia de herramientas preexistentes, como el programa QRISK3 utilizado por médicos británicos para evaluar el riesgo de infarto o ictus, por su alcance integral.
Ewan Birney, coautor del estudio, incidió en que Delphi-2M «puede gestionar todas las enfermedades al mismo tiempo y durante un largo periodo», superando las limitaciones de los sistemas especializados.
Hacia una medicina más proactiva
En el futuro, modelos como este podrían «orientar el seguimiento y, posiblemente, conducir a intervenciones clínicas más tempranas» en la medicina preventiva, según Gerstung. A mayor escala, estas herramientas tienen el potencial de «optimizar los recursos en un sistema sanitario bajo presión», afirmó Tom Fitzgerald, del Laboratorio Europeo de Biología Molecular y también coautor del estudio.
Desafíos y el horizonte ético de la IA médica
A pesar de su prometedor potencial, los equipos de investigación indicaron que Delphi-2M debe someterse a más pruebas y aún no está listo para su uso clínico generalizado. Sin embargo, este avance representa un hito crucial.
Gustavo Sudre, profesor en el King’s College de Londres especializado en IA médica, describió este desarrollo como «un paso significativo hacia una forma de modelización predictiva en medicina que sea escalable, interpretable y, lo que es más importante, éticamente responsable». La integración de la inteligencia artificial predictiva en la salud pública abre un debate necesario sobre la privacidad de los datos, la equidad en el acceso y la formación del personal médico.