
Una estrategia con resultados que no se veían desde 2018
Cuando Omar García Harfuch subió al estrado frente a los diputados, no solo llevó cifras: trajo un relato de cambio. En lo que va del gobierno de Claudia Sheinbaum, la violencia letal ha bajado a niveles no vistos en siete años. Con una narrativa basada en resultados y datos duros, el secretario de Seguridad y Protección Ciudadana expuso un panorama que, aunque aún complejo, muestra signos de transformación real.
Reducción del homicidio doloso: una cifra que marca época
Un descenso sostenido y medible
Entre septiembre de 2024 y marzo de 2025, el homicidio doloso en México se redujo en 14%, alcanzando su nivel más bajo desde 2018. No es un logro menor. Desde ese año, el descenso acumulado es de 24.8%, según informó García Harfuch ante diputados federales.
Este dato, presentado en pleno Palacio Legislativo, marca un punto de inflexión en la narrativa nacional de violencia, en un país donde por años los titulares hablaron de récords sangrientos y territorios en disputa.
“Hoy podemos decir, con cifras y hechos, que la estrategia está funcionando”, afirmó García Harfuch ante el Congreso.
Estados que marcaron la diferencia
Las reducciones en homicidios se han concentrado en 27 estados del país, con resultados sobresalientes en tres entidades clave:
- Guanajuato: -48%
- Guerrero: -46.1%
- Baja California: -31.3%
Estos estados, históricamente golpeados por la violencia ligada al crimen organizado, hoy figuran como referentes de lo que una estrategia integral puede lograr.
La receta detrás de los resultados: inteligencia, coordinación y prevención
Un nuevo enfoque institucional
Según el secretario, el éxito no se debe a una sola medida, sino a cuatro pilares fundamentales:
- Atención a las causas de la violencia
- Fortalecimiento de la Guardia Nacional
- Uso intensivo de inteligencia e investigación
- Coordinación interinstitucional eficaz
Esta visión integral es la que ha permitido no solo contener, sino revertir tendencias que parecían incontrolables.
“No se trata solo de más operativos, sino de cambiar las condiciones que permiten que el crimen prospere”, subrayó el secretario.
Guardia Nacional: despliegue y presencia territorial
Actualmente, la Guardia Nacional —ya integrada a la Secretaría de la Defensa Nacional— cuenta con más de 130 mil elementos desplegados en todo el país.
Esta fuerza, criticada en su momento por su creación, ha demostrado ser un brazo operativo crucial, combinando presencia territorial con capacidad de respuesta inmediata.
Narco bajo presión: cifras inéditas en decomisos y capturas
Golpes contundentes a las estructuras criminales
La estrategia también ha generado resultados contundentes contra el narcotráfico. De acuerdo con el informe presentado ante los diputados, se han logrado:
- Más de 140 toneladas de drogas incautadas
- 1.5 toneladas de fentanilo decomisadas
- Destrucción de 750 laboratorios clandestinos
- Más de 2,000 armas confiscadas
- 300,000 cartuchos asegurados
Estos números no solo muestran capacidad operativa, sino una presión constante sobre las redes logísticas del crimen organizado.
H3: Detenciones clave: operadores de “Los Chapitos” y más
En el rubro de detenciones, destaca la captura de:
- Operadores clave del grupo “Los Chapitos”
- Líderes regionales de organizaciones criminales en diversos estados
Estos golpes estratégicos no solo desarticulan células, sino también envían un mensaje político claro: el Estado está avanzando hacia la recuperación del control territorial.
El papel del Legislativo: respaldo político a la estrategia
Durante la reunión, el diputado Arturo Ávila, vocero del Grupo Parlamentario de Morena, reconoció la importancia de mantener una relación constante entre el Legislativo y la Secretaría de Seguridad.
“Estos resultados requieren continuidad y acompañamiento institucional. No podemos bajar la guardia”, expresó el legislador.
Este respaldo parlamentario es clave para consolidar reformas, presupuestos y operativos que permitan mantener el ritmo de reducción delictiva en los próximos años.
¿Un modelo replicable o un caso excepcional?
¿Estamos ante un punto de inflexión?
La magnitud de las reducciones y la amplitud territorial de los logros plantean una pregunta inevitable:
¿Es esta estrategia un modelo replicable a largo plazo o un fenómeno momentáneo?
Todo indica que el enfoque —al menos en sus principios operativos y logísticos— podría consolidarse como una política de Estado, más allá de colores partidistas.
Pero el riesgo está latente: si no se mantienen los niveles de inteligencia, coordinación y despliegue, los grupos criminales podrían reorganizarse y contraatacar.
Seguridad en cifras, pero también en confianza ciudadana
Aunque los resultados son alentadores, la percepción de inseguridad sigue siendo un desafío pendiente. La confianza ciudadana en las instituciones, especialmente en contextos locales, tarda más en construirse que una estadística trimestral.
¿Qué sigue? Consolidar lo logrado. Ampliar los programas de prevención. Invertir en justicia local. Y, sobre todo, no permitir que los éxitos de hoy se conviertan en complacencia mañana.