
El pasado financiero que no termina de cerrarse
La presidenta Claudia Sheinbaum volvió a encender un tema sensible: el Fobaproa. Desde Palacio Nacional, llamó a revisar la auditoría de 1998 antes de abrir una nueva investigación. ¿Qué oculta el pasado económico de México?
Sheinbaum reabre el expediente Fobaproa: ¿revisión o revancha?
La jefa del Ejecutivo federal, Claudia Sheinbaum Pardo, retomó este 7 de mayo un tema emblemático de la historia económica reciente de México: el Fondo Bancario de Protección al Ahorro (Fobaproa). En medio de la intención de Morena de crear una nueva comisión en el Senado para investigar este mecanismo de rescate bancario, la mandataria sugirió ir primero a los archivos: “Vale la pena revisar qué fue lo que presentó la Auditoría en 1998”, declaró en la Mañanera.
La palabra clave es clara: Fobaproa. Pero el subtexto político es aún más relevante: Sheinbaum apunta no solo a la historia, sino al presente. A los saldos de un modelo económico que sigue marcando a generaciones.
¿Qué es el Fobaproa y por qué sigue siendo polémico?
Un rescate millonario con consecuencias sociales
El Fobaproa fue un mecanismo implementado en 1995 para absorber las deudas de bancos privados tras la crisis financiera de 1994. Su objetivo era evitar un colapso sistémico. Lo que terminó ocurriendo, sin embargo, fue la socialización de la deuda bancaria, es decir, convertir deudas privadas en compromisos públicos.
En 1998, ya bajo fuerte presión política, se realizó una auditoría para evaluar el impacto y legalidad de este proceso. El resultado fue un documento técnico que hoy, más de 25 años después, vuelve al centro del debate nacional.
1998: el año clave de la auditoría al Fobaproa
La Auditoría Superior de la Federación presentó en 1998 un informe sobre el manejo del Fobaproa. El gobierno de entonces, encabezado por Ernesto Zedillo, fue el gran impulsor de esta política. La auditoría incluyó la intervención de un auditor internacional y fue uno de los primeros ejercicios de fiscalización con alcance global en México.
El informe está disponible públicamente. No es un expediente cerrado, pero sí olvidado por la narrativa oficial durante años. La insistencia de Sheinbaum en retomarlo sugiere un movimiento estratégico: reactivar la memoria histórica para legitimar nuevas acciones políticas.
Morena y la nueva comisión en el Senado: ¿para qué?
Una jugada legislativa con implicaciones electorales
Morena impulsa en el Senado la creación de una comisión especial para investigar el Fobaproa. Esta iniciativa podría verse como una búsqueda de justicia financiera, pero también como un gesto de confrontación ideológica con el pasado neoliberal que el partido rechaza.
Para Sheinbaum, sin embargo, antes de abrir una nueva investigación se debe revisar el material ya existente. El mensaje parece claro: no se trata solo de investigar, sino de comprender a fondo qué ocurrió y qué se omitió.
Sheinbaum y el discurso contra el neoliberalismo
Una narrativa que conecta con la base social
Este episodio se suma a las recientes críticas de Sheinbaum hacia Ernesto Zedillo, quien como presidente entre 1994 y 2000 defendió el Fobaproa como medida necesaria para evitar un colapso bancario. La presidenta en funciones ha recuperado un discurso fuertemente crítico con el neoliberalismo, conectando con un electorado que aún resiente los efectos del endeudamiento público derivado del rescate bancario.
¿Por qué ahora?
La coyuntura no es casual. En plena carrera hacia la consolidación del segundo piso de la llamada Cuarta Transformación, Sheinbaum necesita construir su propio relato de ruptura con el pasado. Reabrir el caso Fobaproa le permite:
- Conectar con la memoria crítica de la izquierda.
- Poner en entredicho la legitimidad del modelo económico heredado.
- Contrastar su visión con la de sus antecesores tecnócratas.
Contexto local: impacto en el sureste y el Caribe Mexicano
Aunque el Fobaproa parezca un tema nacional, su impacto fue local y desigual. En estados del sureste, como Quintana Roo, Campeche y Yucatán, los efectos fueron dobles: por un lado, se restringió el crédito para pequeñas empresas y, por otro, se profundizó la dependencia de la inversión federal para proyectos turísticos y de infraestructura.
En regiones con alta informalidad, el rescate bancario no alivió al ciudadano común, sino que consolidó estructuras de poder financiero alejadas de la economía popular. Revisar el Fobaproa es también preguntarse cómo se gestó la desigualdad regional que aún persiste.
¿Qué puede cambiar una revisión del Fobaproa hoy?
Más que justicia histórica, una posible reconfiguración política
Revisar la auditoría del Fobaproa no implica necesariamente sanciones inmediatas. Pero sí puede:
- Legitimar nuevas reformas en materia bancaria y financiera.
- Ofrecer fundamentos para auditorías más profundas a fondos y fideicomisos actuales.
- Abrir una nueva etapa en la narrativa del combate a la corrupción estructural.
El pasado como herramienta de poder
Claudia Sheinbaum ha demostrado que no solo quiere gobernar: quiere reinterpretar la historia reciente de México desde su óptica. El Fobaproa, símbolo del modelo económico neoliberal, se convierte así en una herramienta discursiva y política.
El viernes, según anunció, retomará el tema en su conferencia matutina. La expectativa es alta: ¿usará el expediente para abrir un nuevo capítulo de confrontación ideológica? ¿O para cimentar su propio relato de justicia financiera?