CHETUMAL.- La regidora Lidia Rojas, del partido Movimiento Ciudadano, denunció públicamente una campaña de desprestigio en su contra, al señalar que desde hace una semana han circulado mensajes y videos con información falsa que atribuyó al “sistema” político del municipio de Othón P. Blanco.
“Hace una semana el sistema comenzó una guerra sucia en mi contra, con mensajes de WhatsApp, videos e información completamente falsa. Son puras mentiras e inventos. Están desesperados, dando patadas de ahogado porque su proyecto de gobierno se hunde cada vez más, ni con el apoyo del Gobierno del Estado salen a flote”, declaró.
Rojas aseguró que ni ella ni su familia tienen vínculos económicos con la administración municipal, y rechazó haber solicitado obras o favores, como –dijo– se ha querido hacer creer en medios y redes sociales.
“Ni mi prometido ni ningún familiar está en la nómina del municipio. Nunca he pedido obra. Eso es completamente falso y por eso están enojados: no han encontrado la forma de callarme”, afirmó.
La regidora señaló que la campaña en su contra es financiada con recursos públicos y forma parte de las mismas prácticas que, recordó, los actuales funcionarios criticaban en el pasado.
“La política para mí es vocación; para ellos, negocio. Usan el dinero público para pagar notas falsas, crear páginas y pagar publicidad en mi contra, además de enriquecerse. Pero ¿por qué tanto gasto para atacarme? Porque saben que no me detengo, que sí señalo lo que está mal y que trabajo cerca de la gente”, sostuvo.
También afirmó que en el gobierno municipal de Othón P. Blanco hay corrupción evidente, visible en obras mal hechas y en la opacidad para entregar información pública.
“La corrupción se ve a simple vista. He pedido información de esas obras y no me la quieren dar. Ellos ya forman parte de la vieja política, están acostumbrados a hacer acuerdos en lo oscurito. Pero yo soy chetumaleña, tengo valores, y sí me preocupo por mi municipio”, dijo.
Finalmente, Lidia Rojas advirtió que no cederá ante los ataques y responsabilizó al actual gobierno municipal del deterioro de la imagen de Chetumal.
“Hoy tienen el poder, pero mañana la gente decide, como ya decidió en la capital. No me van a callar ni me van a intimidar. Y eso les desespera”, concluyó.