El demoledor golpe de Joey Bosa a Aaron Rodgers que revivió a los Bills

El golpe que fracturó la nariz de Aaron Rodgers y los cánticos de "Fuego Tomlin" en Pittsburgh. Análisis de cómo Joey Bosa salvó a los Bills (7-5) en la carrera por los playoffs.
El demoledor golpe de Joey Bosa a Aaron Rodgers que revivió a los Bills

La línea que separa la debacle de la resurrección en la NFL es, a menudo, una única jugada defensiva. Para los Buffalo Bills, el domingo representó ese punto de inflexión. El equipo estaba en peligro de caer a 7-5 y posiblemente perderse los playoffs, mientras se encontraba detrás de los Pittsburgh Steelers por 7-3 al comienzo de la segunda mitad, en una actuación que «no se veía bonito». Sin embargo, un violento impacto reescribió el guion.

El golpe que redefinió la temporada de Búfalo

Si los Bills logran tener una temporada especial, el golpe propinado por el ala defensiva Joey Bosa a Aaron Rodgers será recordado durante mucho tiempo, pues salvó al equipo en un juego crucial contra los Steelers.

Los $12.6 millones justificados en una jugada

Los Buffalo Bills habían firmado a Joey Bosa, veterano cazamariscales procedente de Los Angeles Chargers, con un contrato de un año y $12.6 millones la temporada baja pasada. A pesar de que Bosa no había tenido una gran temporada, sumando solo cuatro capturas de cara al partido dominical, su desempeño fue potencialmente salvador.

La secuencia fue dramática:

  • Rodgers retrocedió para pasar y rebotó en el bolsillo.
  • No se percató de que Bosa se acercaba a él por detrás.
  • Bosa aplastó a Rodgers con un golpe.
  • Rodgers perdió el balón (fumble).
  • El esquinero Christian Benford recuperó el ovoide y lo devolvió para un touchdown.

Esta acción defensiva no solo le dio a los Bills la ventaja, sino que nunca la devolvieron, ganando 26-7.

Aaron Rodgers, golpeado y sangrando

El mariscal de campo de los Pittsburgh Steelers, Aaron Rodgers, ya lidiaba con dolor, pues había sufrido una fractura en su muñeca izquierda antes del partido del domingo. Luego de ser impactado por Bosa, Rodgers no se levantó de inmediato y tuvo que lidiar con aún más dolor.

Su rostro estaba ensangrentado cuando se puso de pie. Ingresó Mason Rudolph, quien había sido el mariscal de campo titular la semana pasada. Rudolph lanzó una intercepción en su primera serie. A Rodgers le vendaron el puente de la nariz y, tras perderse una sola serie, regresó al juego. El mariscal, cuya temporada ha sido de altibajos y es la primera con los Steelers (y quizá la última de su carrera en la NFL), fue ineficaz durante la jornada.

La explosión ofensiva y el récord de Josh Allen

La ofensiva de los Bills no había sido buena en la primera mitad del domingo, una continuación de la mala racha que tuvieron la semana anterior contra los Texans. Sin embargo, la gran jugada defensiva y el puntaje de Bosa parecieron quitarle presión a la ofensiva.

Un equipo transformado tras el descanso

Los Bills se convirtieron en un equipo completamente diferente en la segunda mitad, y la preparación comenzó después de la gran jugada de Bosa. El juego terrestre fue fundamental para llevarse la victoria, ya que Buffalo totalizó 249 yardas terrestres.

Otros momentos clave de la segunda mitad incluyeron:

  • Touchdown de Coleman: En cuarta y gol, Josh Allen golpeó a Keon Coleman en un touchdown crucial de una yarda. Coleman había estado en la «caseta del perro» (sancionado) por faltar a reuniones.
  • Récord de Allen: A principios del último cuarto, Allen y los Bills llevaron el balón a la zona de anotación para un touchdown de ocho yardas. Este fue el touchdown número 76 por tierra de Allen, rompiendo el récord de la NFL que ostentaba Cam Newton de touchdowns por tierra para un mariscal de campo.

La defensa, que había tenido problemas esta temporada, salió airosa cuando el juego estaba en duda. Los Steelers, por su parte, no tuvieron un juego terrestre largo. Cuando los Bills tomaron una ventaja de 23-7 a menos de un minuto del último cuarto, los Steelers tenían solo 90 yardas totales (45 pases y 45 carreras).

Crisis en Pittsburgh: el descontento contra Mike Tomlin

La carrera por los playoffs de la AFC se aprieta y ambos equipos necesitaban la victoria. Los Steelers son los que están en más dificultades después del domingo, perdiendo la oportunidad de aprovechar una sorpresa ante los Baltimore Ravens el jueves por la noche.

Actualmente, los Steelers tienen marca de 6-6, empatados con los Ravens en el primer lugar de la AFC Norte. Los Cincinnati Bengals, con marca de 4-8, tienen de repente algo de vida.

Implicaciones de los playoffs y el grito de «Fire Tomlin»

Ha habido un descontento palpable entre un gran grupo de fanáticos de los Steelers con el entrenador Mike Tomlin. El sentimiento se debe a que el equipo continúa superando el umbral de los .500, pero rara vez se convierte en un factor real en los playoffs. En medio de la fea derrota 26-7 contra los Bills, se escuchó un ruido audible: el cántico de «Fuego Tomlin» en Pittsburgh.

Para los Bills, que vieron sus esperanzas de ganar la AFC Este desvanecerse en gran medida cuando los New England Patriots comenzaron con marca de 10-2, una derrota habría sido perjudicial para asegurar un lugar de comodín. Aunque aún tienen cuestiones que resolver, la preocupación que existía durante el entretiempo fue rectificada con una merecida victoria que los mantiene en la pelea.

© Copyright 2025 – Caribe Peninsular. Todos los Derechos Reservados.

Compartir

Anuncio

Las noticias al momento