El temor se cierne sobre la colonia Francisco Villa en Acapulco. Vecinos denuncian un desgajamiento inminente de un cerro, provocado por excavaciones sin permiso, que amenaza con el colapso de múltiples viviendas. La situación demanda una intervención urgente para evitar una catástrofe mayor.
El colapso inminente: Una crónica de negligencia
Habitantes de la colonia Francisco Villa, ubicada en la parte alta de Acapulco, bloquearon este martes la avenida Ruiz Cortines, una de las más transitadas de la ciudad. Su clamor era unánime: la intervención inmediata de las autoridades de los tres niveles de gobierno para detener el desgajamiento total de un cerro que, según sus testimonios, ha sido socavado por un constructor privado.
Excavaciones sin licencia: El origen del riesgo
Las excavaciones por parte del constructor privado comenzaron en enero pasado en el predio ubicado en la avenida Ruiz Cortines número 11. Los vecinos han denunciado que los responsables de la obra jamás exhibieron licencia de construcción. Una de las afectadas, Alejandra Isabel Meza Nava, señaló que «no sabemos cómo es que lograron excavar todo este tipo, estuvieron desde enero hasta abril» sin los permisos correspondientes. La falta de documentación y la ejecución deficiente de los trabajos son señaladas como la causa principal del deterioro visible del cerro.
La escalada del peligro: Meses de deslaves
La inestabilidad del terreno se hizo evidente desde abril, cuando una primera parte del cerro se vino abajo. Con la llegada de la temporada de lluvias, los deslaves se profundizaron, agravando la situación. Después del 15 de junio, otra porción del cerro se desgajó, lo que provocó la presencia de personal de Gobernación en el sitio. Sin embargo, el 24 de septiembre, una nueva sección del terreno cedió. Este proceso gradual ha socavado los cimientos de al menos tres domicilios, dejando al cerro en un estado de colapso inminente, visible a simple vista.
La voz de los afectados: Hogares en riesgo
Los habitantes de la colonia Francisco Villa han expresado su desesperación ante la inacción. Cuatro domicilios en la calle Felipe Ángeles y el andador Isidro Fabela de la misma colonia, así como el plantel de Bachilleres número 32, donde el muro de la cooperativa se derrumbó, se encuentran directamente afectados.
Exigencia ciudadana y respuesta oficial
Una pancarta desplegada por los manifestantes articulaba su súplica: «Somos vecinos afectados por la mala excavación de este predio. Nuestros hogares están en riesgo. Solicitamos intervención inmediata por parte de la presidencia para encontrar solución y evitar el colapso». Alejandra Isabel Meza Nava enfatizó: «Suplicamos que las autoridades tomen acciones sobre el terreno, sabemos que es propiedad privada, pero nos está ocasionando daño». Acusaron al representante legal del propietario y responsable de la obra, identificado como don Jorge, de argumentar que los daños son resultado de un desastre natural, una versión que desmienten rotundamente.
Acuerdos en la minuta: ¿Solución o tregua?
Ante la presión ciudadana, acudieron al sitio autoridades municipales de obras públicas, protección civil y Gobernación municipal. El bloqueo fue levantado a las 12:30 de la mañana, tras la firma de una minuta de acuerdos. En ella, las autoridades se comprometieron a vigilar la actuación de los constructores, quienes, a más tardar esta semana, deberán iniciar los trabajos de contención para evitar el desgajamiento total del cerro. Los habitantes exigieron que las reparaciones pertinentes se inicien a la brevedad, confiando en la intervención legal de la autoridad para prevenir el desastre.