El Kremlin anunció este jueves que Vladimir Putin y Donald Trump se reunirán en los próximos días, un encuentro crucial para el conflicto en Ucrania. Esta cumbre Putin-Trump, la primera entre líderes de Estados Unidos y Rusia desde junio de 2021, se produce mientras el presidente estadounidense busca un avance para poner fin a la guerra.
Anuncio y expectativas geopolíticas
La noticia de esta inminente cumbre Putin-Trump fue revelada este jueves por el Kremlin. El asesor del Kremlin, Yuri Ushakov, confirmó que Rusia y Estados Unidos habían acordado la celebración de este encuentro «en los próximos días». La última cumbre entre los líderes de ambas naciones data de junio de 2021, cuando Joe Biden y Putin dialogaron en Ginebra, Suiza.
El presidente ruso, Vladimir Putin, en una reunión con el presidente de los Emiratos Árabes Unidos (EAU), señaló que Abu Dabi sería un lugar «totalmente adecuado» para la reunión, aunque se abstuvo de confirmar la sede definitiva. El anuncio ocurre un día después de que Steve Witkoff, enviado de Trump, conversara durante tres horas con Putin en Moscú, sentando las bases para este encuentro. Un funcionario de la Casa Blanca también indicó este miércoles que Trump podría reunirse con Putin «tan pronto como la próxima semana».
La estrategia de Trump: presión y negociación
Donald Trump busca activamente poner fin a la guerra de Ucrania, que se extiende por tres años y medio y es el conflicto más mortífero en Europa desde la Segunda Guerra Mundial. Sin embargo, sus comentarios públicos han oscilado entre la admiración y las duras críticas hacia Putin. El presidente estadounidense ha expresado su creciente frustración con su homólogo ruso y ha amenazado con nuevas sanciones si Putin no accede a poner fin al conflicto.
Amenazas económicas y diplomacia
Como parte de su estrategia de presión, Trump impuso este miércoles aranceles más altos a India por la compra de petróleo ruso y amenazó con medidas similares a China, el otro gran comprador de crudo de Rusia. La incertidumbre persiste sobre si anunciaría nuevas sanciones una vez vencido el plazo del viernes.
El New York Times informó que Trump manifestó a líderes europeos, durante una conversación telefónica este miércoles, su intención de reunirse con Putin para luego proseguir con un encuentro trilateral que incluiría al presidente ucraniano Volodymir Zelensky.
Repercusiones económicas en Rusia
La expectativa de la cumbre Putin-Trump generó un impacto inmediato en los mercados rusos. El principal índice bursátil ruso, MOEX, ganó hasta 5 por ciento tras conocerse la noticia, alcanzando su nivel más alto en dos meses. El rublo, por su parte, logró máximos de dos semanas frente al dólar estadounidense y el yuan chino. Analistas de Alfa Bank señalaron en una nota que «las acciones rusas se están disparando. Los inversores esperan que la reunión (Trump-Putin) sea un paso hacia la normalización de la situación geopolítica».
La inquietud europea y la postura de Ucrania
Desde la invasión rusa a Ucrania en febrero de 2022 —justificada por Rusia como represalia a amenazas a su seguridad tras la intención de Ucrania de sumarse a la Organización del Tratado del Atlántico Norte y con el objetivo de “desnazificar” a la ex república soviética—, la comunidad internacional ha observado con atención la evolución del conflicto.
Las exigencias de Volodymir Zelensky
Los líderes europeos y Ucrania temen que Trump, quien ha expresado simpatía por algunas de las demandas de Rusia, pueda alinearse con Putin para forzar un acuerdo sobre Zelensky que resulte profundamente desventajoso para Kiev. Ante este escenario, el presidente ucraniano, Volodymir Zelensky, conversó este jueves con los líderes de Francia y Alemania, así como con la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen.
Zelensky enfatizó que Europa debe participar en el proceso de paz, argumentando en X: «La guerra está ocurriendo en Europa, y Ucrania es parte integrante de Europa: ya estamos en negociaciones de adhesión a la UE. Por lo tanto, Europa debe participar en los procesos pertinentes». Señaló que la guerra debe terminar con una «paz digna», destacando que cualquier acuerdo alcanzado marcará el panorama de la seguridad en Europa durante las próximas décadas. El mandatario ucraniano añadió que Rusia aún no se ha declarado dispuesta a un alto el fuego y advirtió que «el futuro próximo debe mostrar cuáles serán las consecuencias si Rusia sigue alargando la guerra y perturbando los esfuerzos constructivos».
Zelensky afirmó que se han discutido varios posibles formatos de reuniones bilaterales y trilaterales con Trump y los aliados europeos de Ucrania, concluyendo con una declaración de firmeza: «Ucrania no tiene miedo a las reuniones y espera el mismo enfoque valiente de la parte rusa».
Análisis de Kiev: ¿una recompensa para Rusia?
Mykola Bielieskov, del Instituto Nacional de Estudios Estratégicos de Kiev, ofreció una perspectiva crítica, indicando que la oferta de una cumbre Putin-Trump equivalía a darle una recompensa al líder ruso sin obtener nada a cambio. En su opinión, esto da a Rusia «la impresión de salir del aislamiento y hablar en pie de igualdad». Bielieskov sugirió que el Kremlin «seguirá alargando el tiempo, utilizando el mero hecho de las reuniones como prueba de apertura a las negociaciones sin ninguna concesión».
La inminente cumbre Putin-Trump se perfila como un momento de máxima tensión geopolítica. ¿Podrá este encuentro acercar el fin de la guerra en Ucrania, o simplemente servirá como una plataforma para las distintas visiones estratégicas de las potencias globales, sin avances concretos hacia la paz?