
La política en Morelos se encuentra en el ojo del huracán tras la entrega de 23 mil firmas en la Cámara de Diputados, exigiendo el desafuero del Diputado Cuauhtémoc Blanco. Legisladoras del PRI y PAN argumentan presuntos vínculos del mandatario con el crimen organizado y una alarmante omisión en materia de seguridad.
La acusación contra Blanco: Vínculos con el crimen y crisis de seguridad
Diputadas federales del PRI y PAN formalizaron su demanda de desafuero contra el exgobernador de Morelos, Cuauhtémoc Blanco Bravo, presentando 23 mil firmas ciudadanas que respaldan la solicitud.
Las legisladoras basan su acusación en la presunta relación del exgobernador con grupos delictivos, respaldada por fotografías y testimonios difundidos en medios de comunicación. La gravedad de estas evidencias ha escalado la presión política en torno a Blanco.
Además de los presuntos vínculos, las diputadas señalan a Blanco Bravo por omisiones en materia de seguridad pública, argumentando que estas han provocado un aumento significativo de la violencia y la inseguridad en el estado de Morelos.
Reacciones y demandas en la Cámara de Diputados
Las diputadas han solicitado a la Sección Instructora de la Cámara de Diputados iniciar el proceso de desafuero contra el Diputado. Este proceso permitiría que Blanco sea investigado formalmente por las autoridades competentes.
La diputada priista Marcela González Castillo enfatizó que la exigencia es una respuesta a la ciudadanía y se suma a las denuncias presentadas ante la Fiscalía General de la República y otras instancias. La presión ciudadana se considera un factor crucial en este proceso.
Por su parte, la diputada panista Teresa Castell de Oro Palacios describió la situación en Morelos como una “crisis de inseguridad y gobernabilidad”, argumentando la urgencia de una investigación a fondo sobre el exgobernador.
Las legisladoras han expresado su confianza en que la Cámara de Diputados dará trámite a la solicitud de desafuero y que actuará con imparcialidad y transparencia en el caso. El seguimiento de este proceso será crucial para la estabilidad política en Morelos.
El futuro político de Cuauhtémoc Blanco pende de un hilo, tras la presión ejercida por diputadas federales y la entrega de miles de firmas exigiendo su desafuero. Las acusaciones de vínculos con el crimen organizado y negligencia en la seguridad, sumadas a la exigencia de transparencia en la investigación, podrían tener implicaciones significativas para la gobernabilidad en Morelos y la credibilidad de las instituciones políticas a nivel nacional.